La Consejería de Sanidad del Gobierno canario anunció ayer que investigará las causas del incremento del número de agresiones a médicos por parte de los pacientes o de familiares de los pacientes en centros de salud y hospitales canarios. La apertura de dicha investigación se produce después de que LA PROVINCIA / Diario de Las Palmas publicara en su edición de ayer lunes que más de 20 facultativos han utilizado el teléfono habilitado desde hace tres meses por el Colegio de Médicos de Las Palmas para ofrecer información a los profesionales que han sufrido una agresión.
Fuentes de la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias indicaron ayer a este periódico que "la Dirección General de Recursos Humanos va a investigar a qué se debe el incremento para determinar qué lo puede haber provocado y las medidas necesarias a poner en marcha, ya sean de seguridad o de cualquier otra índole".
La mitad de los incidentes violentos hacia los médicos se produce en los centros de salud, mientras que un 25% sucede en los servicios de Urgencias y el resto entre los hospitales públicos y privados, según datos aportados por el Colegio de Médicos de Las Palmas.
Las agresiones a los profesionales sanitarios pueden ser tanto físicas, como verbales o mixtas. En el caso de los médicos en el ejercicio de su profesión, el 60% de los altercados son verbales y el 40% físicos, de los que sólo el 3% son de gravedad. La intimidación y las amenazas están condicionando el ejercicio de la profesión médica, tal como denuncia el Colegio de Médicos. Una situación que incluso ha motivado que los profesionales soliciten una baja laboral sobre todo cuando se ven afectados por algún tipo de agresión física.
Desde el Colegio de Médicos se ha calificado de "inaudito" que en solo tres meses, desde que se puso en marcha este servicio telefónico, se hallan recibido más de una veintena de llamadas en demanda de asesoramiento sobre agresiones físicas o verbales tanto de pacientes como de familiares de estos. La organización colegial asegura que se producen muchas más agresiones de las que se comunican a través de este servicio de asesoramiento telefónico.
En cuanto a la naturaleza de estas agresiones sobre las que investigará a partir de ahora la administración sanitaria, y de acuerdo a los datos facilitados por el Colegio de Médicos de Las Palmas, la mayoría de ellas se debe a que el paciente no encuentra una respuesta positiva a sus demandas ante el facultativo, bien de prescripción de medicamentos, en la petición de pruebas diagnósticas especiales, la solicitud de una segunda opinión médica, e incluso ante la negativa a dar el visto bueno a una posible baja laboral.
En este caso, estas situaciones violentas suelen circunscribirse en el ámbito de los centros de salud, si bien en los hospitales se da la circunstancia de que no sólo son los pacientes los que fomentan las agresiones verbales y/o físicas, sino también los familiares que los acompañan.
Los médicos no son los únicos que aportan datos que indican un aumento de la agresividad en las consultas y en el ámbito sanitario, en general. El propio Servicio Canario de la Salud (SCS) publicó hace unos días que a lo largo de 2015 el personal sanitario denunció 291 agresiones, mientras que durante 2014 fueron un total de 244 y en 2013 unas 226.
