Un médico que es agredido en el ejercicio de su profesión normalmente sufre daños psicológicos permanentes que se acrecientan cada vez que vuelve a entrar en su consulta. "No se trata sólo de la lesión física, sino también de la psicológica. Afortunadamente la mayoría de las lesiones físicas son menores, pero las lesiones psicológicas acompañan al profesional durante toda su vida", aseguró Marta León, secretaria general del Colegio de Médicos de Las Palmas.
"Cualquier situación violenta que suceda dentro de su consulta y que pueda crispar al médico, le va a saltar la alarma. El síndrome de estrés postraumático es propio de estas situaciones", añadió León, que lamentó que los profesionales sean agredidos por los usuarios a los que "cuida y protege".
Según datos aportados por el colegio, el 60% de las agresiones a los médicos son verbales, mientras que el 40% son físicas, de las que menos del 3% son de una gravedad tal que obligan al médico a tomarse una baja laboral, como es el caso de la médico del centro de salud del Puerto agredida la semana pasada.
"El Colegio de Médicos de Las Palmas está muy preocupado por estos incidentes porque su objetivo es que los profesionales trabajen en un lugar seguro. Para ello destinamos todo nuestro esfuerzo",
añadió León que pidió "como mínimo" un "respeto al trabajo" y "a los profesionales que lo realizamos". "Los problemas no se pueden resolver de forma agresiva y violenta. Es esencial el respeto a la persona y a la profesión médica", concluyó.
