"Por delante tenemos el reto de cambiar las reglas del juego interno del ITC, reestructurar a nuestro personal porque venimos de unos desajustes anteriores, de unas reducciones que no habían sido adecuadamente planificadas y ahí nos queda camino por recorrer pero estamos en la senda correcta", afirmó Gabriel Megías, gerente del Instituto Tecnológico de Canarias en relación a la incertidumbre laboral que ha planeado estos años sobre el personal del Instituto.
Megías, aclaró que si bien no van a haber despidos generalizados, no se descarta alguno puntual, motivado por el "desequilibrio" de la actual estructura de personal. En este sentido destacó que la actividad del ITC es heterogénea, con dos grandes áreas, la de los servicios o departamentos de I+D+i, y la parte de los servicios centrales que dan apoyo a esa actividad científica. "Llevamos una tendencia de 4 o 5 años de continuo decrecimiento del personal, realizado principalmente a través de mecanismos de bajas anticipadas voluntarias, por lo que la empresa no tenía capacidad de planificar los recursos, y eso ha desequilibrado la estructura interna. Ahora no todos los departamentos son vasos comunicantes y ahora mismo tenemos perfiles que no somos capaces de encajar", indicó el gerente.
No obstante puntualizó que van a agotar todas las opciones que tienen a su alcance, de movilidad interna y externa, antes de tener que tomar una decisión al respecto, "pero que pueda haber algún despido puntual no es descartable", subrayó, "porque puntualmente habrá excepciones que ahora se nos hace difícil encajar".
Gabriel Megías recordó que para el próximo año, el presupuesto de la entidad crece casi un 20%, una tendencia que quieren consolidar para garantizar la viabilidad futura del Instituto Tecnológico de Canarias. "Tenemos que crecer de forma equilibrada, con los pies firmes, para que no nos vuelva a pasar lo que ya le pasó al ITC, que por lo que sea cambie la coyuntura y nos vuelva a coger desprevenidos".
