La conductora del vehículo siniestrado el pasado sábado 9 de abril por la noche, en el que falleció el agente de la Guardia Civil Alejandro Cruz Vizcaíno, de 29 años de edad, triplicó la tasa de alcohol en sangre permitida y dio positivo en el control de sustancias estupefacientes, concretamente cannabis. En el coche, que se salió de la calzada y chocó contra una palmera en una vía de Arrecife, en la isla de Lanzarote, viajaban, además de la conductora y el fallecido, otras dos personas más que aún se encuentran hospitalizadas debido a las heridas sufridas.

El accidente se produjo el pasado sábado por la noche en la carretera LZ-2. Los ocupantes del vehículo volvían de Arrecife de ver un partido de fútbol por la televisión y de celebrar que varios agentes del puesto de San Bartolomé, en el que trabajaban tres de los ocupantes del vehículos, iban a ser destinados a Gran Canaria.

El coche, de la marca Mini, se salió de la calzada en la entrada a la localidad de El Cable, donde se produjo una fuerte colisión frontal contra una palmera, que provocó que uno de los ocupantes muriera en el acto.

Alejandro Cruz Vizcaíno viajaba en el asiento trasero del vehículo junto a otro compañero, también agente del Instituto Armado, y ninguno llevaba puesto el cinturón de seguridad obligatorio.

Como consecuencia del accidente, a la joven que viajaba en el asiento del copiloto se le ha extirpado el bazo y el otro ocupante tiene lesiones en las piernas. Ambos todavía se encuentran hospitalizados en el Hospital General de Lanzarote Doctor José Molina Orosa y evolucionan favorablemente de sus heridas.

En estado de 'shock'. A la conductora, también guardia civil de profesión, se le dio el alta hospitalaria pocos días después del trágico accidente, aunque todavía se encuentra en estado de shock, según las fuentes consultadas por la agencia de noticias Acn Press.

Los agentes de la Policía Local de Arrecife son los encargados de realizar las correspondientes diligencias sobre lo ocurrido la noche del sábado 9 de abril. La conductora puede ser imputada de homicidio imprudente y de lesiones graves, así como por un delito contra la seguridad del tráfico.