Las obras de rehabilitación del área patrimonial de la rambla de Arnao en San Gregorio, y la iniciativa de poner en funcionamiento tres de los cuatro kioscos que aún no están activos en la zona y que son declarados patrimonio de Telde, están llegando a su fin.
Juan Francisco Artiles, concejal de Patrimonio y Urbanismo, prevé que dicha fase esté acabada antes de Navidad. "Actualmente todos los kioscos están limpios y en condiciones", aseguró el concejal, destacando que solo quedan algunos detalles de los mismos y de la zona para terminar.
En cuanto a la situación de asignación de los locales a empresas interesadas, ya se ha abierto el plazo de inscripción para aquellas que quieran presentarse a concurso para adquirirlas. Por el momento se estima "que sean más de quince compañías" las que se incluyan en este proceso de adjudicación y explotación de los locales, según explicó Juan Francisco Artiles.
Después del proceso de limpieza y arreglo de los cuatro kioscos establecidos en la rambla, solo uno de ellos ya está operativo y asignado a una heladería. El comercio está abierto al público y hace uso del espacio dando vida a la rambla. Los otros tres locales serán sacados a concurso próximamente, "aunque aún no hay una fecha fija para ello", apuntó el concejal de Patrimonio.
Casi una década llevan cerrados estos cuatro recintos -uno grande, dos medianos y uno pequeño- que fueron establecidos para animar el área de Arnao e impulsar el desarrollo económico de la misma.
En un principio se destinaron a la apertura de una cafetería, un puesto de prensa, una heladería y una floristería, pero el proyecto finalmente fracasó. Solo se abrieron dos de los comercios, y el auge de los primero años desembocó en un área utilizada solo para el paseo de los vecinos.
Negocios
Tras el cierre de los negocios, estos se convirtieron en espacios maltratados y abandonados con pintadas y suciedad. Hace unos años el grupo de Gobierno formado por PP, Ciuca y CC intentó cambiar la situación de la zona y sacó a concurso la explotación de los kioscos, pero ningún empresario se inscribió en el proceso y este se frustró.
Con el nuevo plan, que parece que va viento en popa, se pretende acabar con el actual estado de inacción de los locales, favoreciendo la zona, ampliando la oferta de ocio y tiempo libre y potencializando el trabajo en la ciudad.
Se espera que en el menor tiempo posible estos inmuebles, declarados de interés público, puedan ser explotados, dando beneficios a la rambla de Arnao y a todo el municipio, comunicando la zona comercial de Telde con la rambla.
