No es un municipio turístico al uso pese a tener una valiosa variedad en su patrimonio histórico-artístico, su costa o su gastronomía. Las playas de Telde, de un público familiar, no solo cuentan en sus principales calas con un buen servicio de restauración o tres banderas azules que renueva cada año, sino que en sus paseos marítimos se puede observar la belleza de sus riscos y mar.
Así lo entienden Cabildo y Ayuntamiento de Telde, que plantean construir tres miradores en sendas zonas costeras -Jinámar, La Garita o Tufia-, lugares menos conocidos, pero con un atractivo paisaje que sorprende al neófito.
La mejora de la costa no se ciñe al paisaje, también al paisanaje. Así, el viejo anhelo de Telde por el b ienestar de los vecinos de los bloques de Los Marinos, en Melenara, puede hacerse realidad después de su exclusión en el vigente plan de vivienda. Después de casi medio siglo, es su turno de obras.