La Provincia - Diario de Las Palmas

La Provincia - Diario de Las Palmas

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

"Veo a la gente disfrutar con mis temas y siento la música como un bien social"

"Siempre he creído que componer es el último paso de este arte, y a mí me queda pendiente ese escalón", indica el músico Gonzalo Macías Sosa

Gonzalo Macías Sosa con su guitarra. LP / DLP

Este jueves presentará su nuevo trabajo musical en la Casa Museo León y Castillo de Telde, ¿en qué consistirá su intervención?

Se trata de un concierto dividido en dos partes. Así, en la primera se llevará a cabo la presentación de mi nuevo disco grabado en 2015 y que ha sido presentado en varias ocasiones, entre ellas ahora en Telde. Durante el acto, interpretaré casi todos los temas de este trabajo que está dedicado a la música canaria pero arreglado para la guitarra clásica. Un repertorio que está compuesto por temas canarios populares y algunos de parrandas menos conocidos.

¿Cuándo comenzó en el mundo de la música?

Empecé en parrandas y grupos de folclore cuando era un niño, con unos siete u ocho años. Mis inicios fueron con la bandurria, pero en ese entonces no eran estudios musicales. Fui evolucionando en este estilo y, después de unos años, comencé a estudiar piano durante dos años y, a partir de ahí, guitarra clásica. Con este último instrumento cursé todos los niveles que hay aquí, hasta terminar el superior y obteniendo la licenciatura. Además, también estudié guitarra moderna.

¿Fue usted el que eligió la música canaria para adentrarse en este mundillo?

Lo hice de la mano de mi padre. Él fue quién me introdujo en este mundo y se lo agradezco mucho. De hecho, en cada concierto o cada vez que me pongo a cantar le dedico el tema que ejecuto. Después de ese impulso, la música se convirtió en mi pasión y me enamoré de ella hasta la fecha, porque es como una telaraña que te atrapa. Es cierto que a veces requiere de muchos sacrificios, pero siempre se ve recompensado por el nivel espiritual que proporciona y esa satisfacción incomparable que se experimenta cuando haces música.

¿A qué se refiere con ese nivel espiritual?

Es algo tan fuerte que siento que no se puede explicar con palabras. La música es algo que llena el alma y es capaz de dar una sensación de satisfacción personal increíble. Además, definitivamente, la veo como un bien social, porque la gente disfruta con lo que haces y es algo que siempre siento cuando estoy dando un concierto con mis temas.

¿Considera que, en su caso, se trata de una vocación clara?

Totalmente. Una vocación convertida en profesión, porque aunque no fuera algo que pensara desde pequeño me he dejado llevar y aquí estoy.

Entonces, ¿no siempre tuvo claro que quería dedicarse a este arte?

Antes de dedicarme totalmente a esto lo alterné con otros oficios como el de jardinero, pero cuando sabes que es vocación, al final todas tus energías e intereses van hacia la música. Poco a poco fui viendo como aumentaba mi nivel de estudio, la dedicación fue creciendo y tiré de todo esto para bien. Soy de los que piensan, como John Lennon, que la vida es aquello que va pasando mientras te empeñas en hacer otro planes, y me siento muy contento de lo que he conseguido estos años con la música.

No es fácil dedicarse a esta profesión y llegar a triunfar.

Quién crea que se hará rico siendo músico o que alcanzará la fama de manera fácil, se ha equivocado de profesión. El objetivo que hay que tener con la música es el de disfrutar y hacer disfrutar a los demás, y el que no lo tenga claro creo que es mejor que se busque otra profesión, porque no es fácil llegar a la fama ni tener dinero. Al contrario, tienes que invertir mucho tiempo y este se acaba convirtiendo en dinero. Así, es mucho sacrificio, que puede traducirse en la familia, pero por eso hay que buscar un equilibrio.

¿Cómo logra mantenerse económicamente un músico?

La verdad es que hoy en día me mantengo, no malvivo y tengo un sueldo digno, pero porque le he dedicado mucho tiempo y mucho de mí mismo durante mucho tiempo. Cuando empiezas te dejas mucho, pero me repito cuando digo que merece la pena.

Es una carrera en la que los frutos se recogen a largo plazo.

Sí. Se dice que un guitarrista clásico que tenga un buen nivel de sonido y sea bueno tarda como mínimo seis años en conseguirlo. Sin duda, es una disciplina como cualquier otra, como la que lleva un deportista de élite, y hay que trabajarla día tras día.

Toca diferentes instrumentos musicales, ¿podría quedarse con alguno?

Les tengo mucho cariño a todos, pero me quedo con la guitarra porque es el principal en mi carrera y al que le dedico más tiempo. Aún así, el resto me ha dado muchas satisfacciones y la verdad es que el piano es un instrumento que me encanta, pero por circunstancias no pude seguir estudiándolo.

La guitarra le ha dado muchas alegrías.

Sí, y también muchos problemas a veces, aunque las satisfacciones son muchas más.

¿Es capaz de sentir que cuando la toca se fusionan en un solo cuerpo?

Sí, creo que he conseguido llegar a ese nivel. Cuando dominas el instrumento y puedes conseguir transmitir algo con él, acompañado con una personalidad introvertida como es la mía, es muy grande. Soy extrovertido lo justo y necesario, y tanto la guitarra como la música en sí me sirven de vía para poder expresar mis sentimientos.

¿También compone?

He hecho algunas cosas, pero ahora estoy en una etapa de mi vida en la que lo más que hago es arreglar temas, y no por necesidad sino por vocación. Casi todo mi repertorio se basa en arreglos propios, y mi próximo disco, que está haciéndose, está basado en música pop como la de The Beatles o Michael Jackson. Aún así, el próximo paso será componer, porque siempre he dicho que el último paso es la composición y a mí me queda ese escalón.

¿Qué siente al tener su primer bebé musical entre sus manos?

Es una cuestión de sensaciones. Este primer disco es, sobre todo, nostalgia desde el recuerdo y la memoria, desde mi padre que fue el primero que me introdujo hasta mi propia experiencia, con cosas que se te quedan grabadas en la mente. Hoy en día, después de tantos años, he retomado todos los recuerdos y sensaciones que tenía cuando era niño, y por eso se lo he dedicado a la música canaria, que fue la que toqué desde pequeño.

Compartir el artículo

stats