¿Qué quiso expresar la Asociación en la charla sobre violencia de género?
Principalmente se ha buscado en el público asistente inculcarles una actitud crítica frente a todos los roles y estereotipos de género que están presentes en diferentes ámbitos de nuestra vida, como la publicidad, la música o el cine, que al final constituyen la punta de iceberg, que se forma también de una base, y todo ello sustenta lo que realmente entendemos como violencia de género. Los medios nos muestran el número de mujeres asesinadas, pero muchas veces en nuestro imaginario colectivo no vemos más allá eso, de lo que pasa realmente.
¿De qué forma se manifiesta ese más allá?
Hay datos reales que demuestran las desigualdades que sufren las mujeres en el día a día. Violencia económica, física, psicológica... Por ejemplo, el Ministerio de Trabajo nos comentaba en marzo que las mujeres cobramos alrededor de un 20% menos que los hombres anualmente. Hay muchos sectores en donde todavía no tenemos las mismas oportunidades. Esto genera desigualdad, y la desigualdad genera violencia de género. Por este lado, hemos querido enseñar a los asistentes a la charla a detectar estas manifestaciones, que muchas veces, por cultura y educación, no son del todo claras. Al final hay que entender que el único factor para sufrir violencia de género es ser mujer. Ninguna mujer está exenta de vivir en un contexto sexista.
¿Cree que hay mucho desconocimiento sobre este tema?
Sí, desde el momento en que el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad nos dice que hay 44 mujeres asesinadas por varones se hace patente que es algo que todavía hay que trabajar, sobre todo desde el punto de vista educativo. Tomar más medidas sobre esta lacra que asegura que las mujeres somos inferiores a los hombres.
¿Ves que las instituciones estén tomando parte para la concienciación de la sociedad?
Cada vez más, pero todavía sigue siendo un problema muy grave. Además su magnitud es planetaria. No sólo en España las mujeres están siendo asesinadas año tras año, es algo que ocurre en todos los países del mundo y no es un problema nuevo. Necesitamos poner todos los recursos sobre la mesa para acabar con esto. Hay un error común, el pensar que las mujeres somos un colectivo y que por tanto es "un problema de mujeres". No, las mujeres somos más de la mitad de la población.
¿Qué haría falta para evitar que continúe esta grave problemática social?
Debería dotarse a los servicios que atienden a mujeres con problemas de violencia de género de mayores recursos económicos para poder atender a la demanda que desgraciadamente existe, y sobre todo prevenir. La prevención en edades tempranas es esencial, y en general hay que conseguir hacer entender que la igualdad es trascendental, que el machismo en un futuro sea un mal recuerdo. Hechos históricos, pero que no volverán a ocurrir.
¿Cree usted que los jóvenes viven una realidad distinta más integradora?
Yo me he dado cuenta que en los colegios si preguntas a los chicos "¿quién ha escuchado que todos los hombres son iguales?" Todos levantan la mano. Y lo mismo pasa en el caso de las chicas. Eso quiere decir que en su entorno esa idea machista de diferencia subyace.
