La empresa turística Lopesan y el Grupo San Roque, del que es accionista desde julio, potenciarán la isla de Gran Canaria como destino receptor de turismo de salud, objetivo con el que pretenden contribuir a desestacionalizar la demanda del sector vacacional.
Esta iniciativa responde al interés del grupo turístico por diversificar su actividad en el archipiélago mientras que para Hospitales San Roque supone un avance en su apuesta por el turismo sanitario.
El presidente de Hospitales San Roque, Mario Rodríguez destaca las excelentes condiciones de Canarias, y especialmente de Gran Canaria, gracias a instalaciones sanitarias y hoteleras de primer nivel, para convertirse en un referente del turismo sanitario en España, una línea de negocio que, a su juicio, se ha explotado poco en el archipiélago.
Rodríguez enfoca esta actividad como una colaboración entre la sanidad y el ocio, ofreciendo en un mismo paquete la posibilidad de hacerse algún tipo de cirugía o tratamiento de calidad superior, junto con algún tratamiento hidroterápico o de belleza, según ha precisado hoy en un comunicado.
Por su parte, el presidente del Grupo Lopesan, Eustasio López, ha señalado que esta nueva alianza con Hospitales San Roque supone un "plus de calidad" para los clientes de sus hoteles, a los que se les ofrecerá un servicio sanitario que abarca desde tratamientos de salud y bienestar hasta chequeos médicos, rehabilitaciones u operaciones quirúrgicas, que podrán compaginar con el descanso vacacional durante su estancia en el destino.
Con esta diversificación de su actividad, el Grupo Lopesan pretende contribuir al crecimiento del turismo sanitario en Canarias, un destino con múltiples atractivos para este mercado como el clima, la seguridad, la calidad o la amplia oferta de servicios de salud que ofrece.
Según la cátedra de Turismo, Salud y Bienestar de la Universidad de Málaga, el turismo sanitario moverá 3.200 millones de euros en Europa en 2015.
Los datos de Turespaña confirman que en 2014, 25.000 turistas se desplazaron a España a tratarse en hospitales privados, y la cifra se dispara con quienes buscan tratamientos en balnearios.
Los turistas atraídos por mejorar su salud invierten entre de ocho a diez veces más que el turista medio.
La consultora Deloitte prevé que este año el turismo sanitario de pacientes privados represente 500 millones de euros en España, solo en gastos directos, y que para 2020 se duplique la cifra.
A ese dato habría que sumar los costes indirectos (hoteles, actividades turísticas, transportes, o gastronomía) del paciente y de sus acompañantes, lo que convierte al turismo sanitario en un importante mercado, de gran proyección especialmente en el archipiélago canario.
Los principales mercados emisores de turismo de salud son Gran Bretaña, Alemania, Rusia, países nórdicos y árabes.
Las especialidades quirúrgicas más demandadas son la estética, la ocular, la ortopédica y la cardíaca.
Los chequeos médicos, la rehabilitación, la odontología, las terapias antienvejecimiento y de salud, y los tratamientos termales constituyen también los principales atractivos para el turismo de salud y bienestar.
