Un expediente X. El caso Bigas se atasca. La situación del marcador central mallorquín de la UD sigue en la casilla inicial. Pedro Bigas Rigo (Palma de Mallorca, 26 años), que tiene contrato hasta junio del 2017, no ha cerrado la ampliación y mejora de su vinculación con la entidad amarilla. "Solo conoce que tiene un año más, y que lo cumplirá", aseguraban ayer desde su entorno.
A inicios del pasado mes de mayo, se aceleraron las negociaciones entre el club amarillo, y el agente del balear, Iñaki Ibáñez [el mismo que lleva los interese profesionales de Javi Garrido, al que se le ha comunicado que no entra en los planes del nuevo proyecto de Setién].
Tras 33 días de conversaciones, no se ha cerrado aún la mejora salarial y ampliación de uno de los activos más cotizados. Con 27 encuentros ligueros y 3 dianas (2.353 minutos), en su estreno de amarillo y tercera campaña en la liga de las estrellas [las dos anteriores fueron con el Mallorca], Bigas ha dado una lección de poderío técnico y físico. A pesar de encadenar dos meses de baja, por una lesión de rodilla -esguince del ligamento colateral-, fue indiscutible en el libreto mágico de Quique Setién. Su concurso ha despertado el interés del Real Betis y Valencia. Aterrizó en la Isla el pasado 13 de julio del 2015, como un refuerzo silencioso del RCD Mallorca de Segunda. Y ahora destila glamour. El próximo enero ya podría negociar con cualquier equipo. Desde la dirección deportiva de la UD se respira optimismo. Serenidad en esta batalla dialéctica.
En pleno proceso de negociaciones, el jugador permanece ajeno a los rumores y se reintegrará el próximo 11 de julio a la pretemporada en el Municipal de San Fernando de Maspalomas. Con Lemos, Aythami Artiles y David García conforman la lista de los zagueros de hormigón armado para el proyecto 2016-17.
Tras llegar a coste cero, en una gran operación del director general Deportivo Toni Cruz [Espanyol y Málaga también pretendían a Bigas], la próxima semana se retoman las negociaciones. Atar al general implacable. Con 67 intervenciones en el planeta de Messi y Cristiano, se aferra a su año de contrato. Y el reloj sigue corriendo. Los lobos ya acechan a una pieza suculenta.
