Una lupa en el reino de Neymar, Romario, Rivaldo y un torrente eterno de glamour. La UD tiene en el cajón de refuerzos de caviar un rostro que agitará a la grada. En el mercado sudamericano, espera el nuevo ídolo. Se sumaría a los éxitos de Salomón Rondón, que llegó a coste cero del Aragua, y fue traspasado al Málaga por una cifra próxima a los tres millones de euros. Ahora, está considerado uno de los artilleros más refutados de Europa tras su paso por Rubin Kazán, Zenit y West Bromwich Albion de la Premier de Guardiola y Mourinho.

Pero el oro de los fichajes perfectos se llama Ezequiel Araujo. El Chino llegó de Boca Juniors, en calidad de préstamos, y dinamitó el planeta de plata con 25 goles. La UD se vio obligada a ejercer la opción de compra y pagar 2,5 millones de euros. En el reino de Messi y Cristiano Ronaldo, Araujo solo pudo firmar seis dianas. Pasó de puntillas. Pero la dirección deportiva mantiene un vínculo estrecho con Sudamérica. Se busca al nuevo Turu Flores, a un artillero perfecto. Al bailarín del área que triture a los rivales como Willian José. El estilete brasileño llegó del Deportivo Maldonado de Uruguay, tras su paso por el Real Madrid Castilla y Real Zaragoza. Resultó un acierto total, dejó nueve dianas y una estela de gigante del área rival. Ahora, descartado, se le añora.

La UD tiene firmes esperanzas de contratar a un extremo total. El sudor de la perfección. Un activo, que juega con las dos piernas, y marcará las diferencias en la mejor liga del mundo.

En esta categoría de refuerzos de lujo de Sudamérica, no conviene olvidar a Lemos. El marcador central uruguayo, tentado por el Barça, es propiedad de la UD tras abonar los amarillos 1,9 millones de euros.

En las próximas horas, se busca a un banda poético. Un mimbre diferente, dotado de una técnica envidiable. Llegaría en calidad de cedido, Toni Cruz y Luis Helguera, miembros de la dirección deportiva, buscan al nuevo diamante. La joya perfecta. El nuevo Araujo.