Primero los jugadores y después el entrenador. Es el planteamiento que realiza la UD Las Palmas para la negociación con Quique Setién. El club comenzó las conversaciones con una oferta por un año más de contrato -hasta junio de 2018- y el cántabro respondió con una propuesta hasta 2020. Ahora la entidad insular ha pedido tiempo al técnico ya que tiene muchos frentes abiertos para cerrar la plantilla: desde la llegada de Hernán Toledo, Jonathan Calleri y Jesé pasando por las salidas de Tyronne y Sergio Araujo hasta las renovaciones de los Castellano con la intención de que el mediocentro pueda salir cedido.

"Estoy esperando una respuesta del club por mi renovación; espero que se cierre la próxima semana", declaró el entrenador en la Cadena Ser después del partido en relación con una propuesta de tres años en el banquillo amarillo. Pese a aplazar unas semanas la operación en el club confían en llegar a un acuerdo para que el entrenador firme la renovación.