Día I, después de Setién. Adiós sin fisuras y en sintonía con el vestuario. Miguel Ángel Ramírez, presidente de la UD, desveló que Setién le solicitó seguir hasta junio, tras comunicarle su salida. Descarta una guerra abierta entre el estratega y los pesos pesados.

El casting ya está en marca. Se busca al nuevo Setién. "Tenemos claro lo que queremos y quiénes pueden ser los que se adapten al perfil. Desde la calma, se analizarán las opciones y nos decantaremos por la que más nos beneficie".

No ve factible hacerlo público antes de junio, porque a lo mejor "el sustituto está entrenando (...) El teléfono no para de sonar y son los representantes. Todo el mundo te llama y te ofrece el que precisas".

Asegura que es una ruptura sin daños colaterales. "Nos queda respetar la decisión de los profesionales. Había esperanzas de que se quedase pero hay que entender a Setién. No me ha molestado",dijo el principal mandatario en Tiempo de Juego de Cadena Cope.

Explicó la secuencia, la negativa llegó en un desayuno. "El pasado viernes, cuando terminó el partido ante el Villarreal, me dijo 'presi mañana vamos a desayunar a las 9.00 horas'. Me tenía que contestar a la oferta que le dimos por escrito hace quince días. Y me comunicó :'He decidido no continuar'. Le pregunté si la tenía meditada. Me dijo que si podía seguir hasta final de temporada y le dije que por supuesto", manifiesta Ramírez.

La UD inicia el casting para relevar al emperador de seda. "Sustituirle no es fácil pero hay una gran dirección deportiva". Reconoció que Setién quería más poder, y esa circunstancia resultó un escollo insalvable. "Tenemos una manera de tomar las decisiones (...) No hay opciones de continuidad. Esto es fútbol, unos se van y otros vienen, pero quedan las entidades. Trataremos de acertar con el sustituto, para que los aficionados estén felices y orgullosos de la nueva UD".

Etiqueta de "gran relación" la sintonía entre Setién y plantel. "Los que no son de la partida, pues tienen quejas. Pero Quique tiene una magnífica relación con ellos; no se lleva mal con Aythami y no es cierto que Jesé estuviese mosqueado [fue suplente ante el Villarreal]. Lemos estaba cabreado, se llevó la corrección del cuerpo técnico tras ver una amarilla, que le deja sin jugar ante el Celta. Eso es todo".

Confirma que hubo un "pequeño distanciamiento" entre Setién y la dirección deportiva. "Son roces propios del desgaste diario entre compañeros de trabajo. Cada uno defiende su postura", finaliza.