En la carrera de Jerónimo Figueroa Momo -tres ascensos a Primera, 116 duelos en la máxima categoría y 237 en Segunda-, su abuela Teresa, fallecida a los 82 años, tuvo un papel crucial. Tanto en la del '11', como en la de sus hermanos Héctor y David -llegaron al primer equipo-. Debutante en febrero de 2003 con la UD, y a las puertas del inicio de su novena campaña en el club isleño, el zurdo brinda un emotivo homenaje a la superabuela de Las Torres. "No se perdía un partido desde la habitación 202 de la Clínica San José (...) Nos defendía a muerte". Es un viaje al corazón más amarillo. Más allá del talento, espera el cariño.

La pasión de Teresa. El orgullo de la saga de los Figueroa. Por encima de los 222 millones de Neymar, late la historia de una heroína del balón. Desde la eternidad, vibra con las genialidades de los tres mosqueteros de Las Torres. Fueron su debilidad.

Teresa Santana Santana, abuela del extremo zurdo de la UD, Jerónimo Figueroa Momo [218 duelos de amarillo, 116 en Primera], falleció el 27 de julio -a los 82 años-. Desde la Clínica San José, ubicada en Padre Cueto, junto a Las Canteras, seguía con devoción las andanzas de sus nietos Héctor Figueroa [20 duelos con la UD y ahora en el Toledo] y David Figueroa [también alcanzó la condición de debutante de la UD y milita en la UD Tamaraceite].

ADN amarillo, cada gol de los Figueroa era una descarga de adrenalina. Los Figueroa tenían en Teresa a la presidenta de su club de fans, consejera, psicóloga, representante..."Se desvivía por sus nietos; tenía mucho carácter y nos defendía a a muerte (...) Recuerdo que me llevó al Insular; teníamos que ir dos horas antes , y así evitar que nos quitaran el sitio" desvela Momo, que saboreó la Primera con cinco escudos -Racing, Albacete, Dépor, Betis y UD-.

En el anecdotario del alfil de oro, la tarde en la que Teresa tiró de paraguas. "En una ocasión, en el campo antiguo de Las Torres, saltó con un paraguas para pegarle al árbitro; habían agredido a su hijo [Antoñín] y desde la pasión, trató de defenderlo. No pitó ni falta...".

Nacida el 12 de marzo de 1935, la abuela del alfil [por parte de su madre Mirela] era la única que le quedaba con vida. Pero ese 27 de julio, le brindó un 'papazo', sellado en el Municipal de Marbella ante el Besiktas turco de Pepe. Abandonó la concentración al día siguiente.

Una obra de arte, brindado al cielo. El guiño más emotivo de la pretemporada. De Momo a Teresa. "Es una fanática de la UD y de Rafa Nadal. Le encanta el tenis; veía todos los partidos del próximo número uno del ranking ATP", detalla el '11'.

El extremo zurdo también batió al Tenerife en Arona, en esta pretemporada mágica del triplete de Márquez -Copa Mahou, Trofeo Ciudad de La Línea y Carranza-.

Gloria, lágrimas y ascensos

En la 2013-14, la del trágico batacazo del 22-J ante el Córdoba, Héctor, con la elástica de la UD, batió al Sabadell -15 de marzo de 2014-. Hizo la 'T' con las manos ante una de las cámaras del partenón de Siete Palmas. Dedicado a Teresa, que lo festejó en la Clínica San José.

La habitación 202 fue una cabina interplanetaria para ver en alta definición las travesuras de los Figueroa. Proezas, lágrimas y ascensos.

De la puñalada del 'Cordobazo', Momo y Héctor conocieron el infierno, al éxtasis del regreso a Primera (21-J). De febrero de 2003 [fecha del debut de Momo] al golazo ante el Besiktas. Más allá de la élite, una entrega sin límites por sus nietos.

Pendiente del latir del alfil de oro, emperador de Chapín y marqués de Heliópolis [subió con Xerez y Betis],se entregó en cuerpo y alma. "Involucrada en el fútbol, nos crió a los cuatro hermanos; fue una madre".Desde el cielo, Teresa insiste. Suspira por el éxito de Márquez en su reino de glamour. Con el paraguas y una bandera de la UD, es el rostro de la pasión. Pendiente de Momo, su debilidad, aguarda el debut. Por encima de todo, está la abuela.