El Gobierno canario no atenderá "por ahora" la demanda de los 88 municipios isleños para que les consignen 12 millones más en partidas sociales el próximo año. La postura inicial del Ejecutivo regional es la que queda "reflejada" en el proyecto presupuestario de 2012 y cuyo reparto entiende es el "justo" tanto para ayuntamientos como para cabildos, según expuso ayer su portavoz y viceconsejero de Comunicación, Martín Marrero.

En rueda de prensa tras el Consejo de Gobierno, Marrero justificó esta posición ya que el marco financiero autonómico diseñado para el próximo año incrementa las transferencias a las corporaciones insulares y locales como se recoge en el Fondo Canario de Financiación Municipal. El portavoz resaltó además que el proyecto presupuestario del próximo año había tenido como "prioridad básica" los servicios sociales con una subida del 1,7% con respecto al actual ejercicio.

"Son otras las partidas que han sufrido reducciones", apostilló Marrero en cuanto a la reclamación acordada el jueves en una abarrotada sesión de la Federación Canaria de Municipios (Fecam). Los alcaldes sostienen que esos 12 millones han desaparecido del presupuesto de este año y tampoco se reflejan en el de 2012, lo que a su juicio pone en peligro las ayudas de emergencia social, las escuelas infantiles y la rehabilitación de viviendas rurales.

En cualquier caso, el portavoz señaló que el Ejecutivo "no cierra la puerta a ningún acuerdo" con los alcaldes, como ha pasado con la prórroga para la devolución de los adelantos a cuentas del REF, e indicó la posibilidad que los grupos parlamentarios en el trámite del proyecto de ley de los presupuestos para 2012 puedan llegar a acuerdos a través de las enmiendas.