La Comunidad Autónoma pone a la venta su parque móvil. El Boletín Oficial de Canarias (BOC) publicó ayer una convocatoria de subasta pública al alza de 38 vehículos, entre automóviles y motocicletas, con el fin de reducir gastos y obtener ingresos a través de la subasta de los mismos. Los precios oscilan entre los 4.930 euros de un Mercedes y los 60 euros de varias motocicletas.

La venta de vehículos oficiales forma parte de la planificación puesta en marcha por la Dirección General de Patrimonio del Ejecutivo regional para desprenderse de propiedades que suponen un gasto innecesario y lograr ingresos extras. En la actualidad, la Comunidad Autónoma cuenta en todas las islas con medio millar de vehículos para todos los servicios que presta.

En esta primera fase, Patrimonio subasta 38 vehículos y a otros 67 les da directamente de baja, según confirmó ayer la Consejería de Economía y Hacienda, porque la antigüedad de los mismos hace inviable la rentabilidad de su venta o por la rescisión de contratos de leasing o renting.

Los vehículos en venta se encuentran en las dos capitales canarias. Entre los mismos hay variedad y precios para todos los gustos. El más caro es un Mercedes con matrícula TF6212AB con un valor de tasación de 4.930 euros. También hay un Volvo con matrícula PMM40586 con precio de salida de 4.030 euros. La mayoría de los precios son asequibles ya que rondan entre los 300 euros de un Renault, 1.770 euros de un Nissan, 700 de un Volkswagen o 1.210 de un Opel. Una vez publicada la subasta, los vehículos serán adjudicados al mejor postor, admitiéndose la presentación de ofertas durante los próximos 15 días.

Además de desprenderse de vehículos que ya son poco utilizados, las arcas autonómicas reciben ingresos extras y se eliminan gastos asociados a los vehículos como seguros, impuestos, combustible y mantenimiento de los mismos.

La venta de vehículos es una de las acciones incluidas en el plan de racionalización del parque móvil elaborado por Patrimonio, iniciado hace un año con otras medidas como el establecimiento de la obligación del uso compartido de vehículos para los desplazamientos de los empleados públicos y de todos los altos cargos, a excepción del presidente y los consejeros.

Patrimonio se encuentra inmerso en una amplia reestructuración del parque móvil, que hasta ahora se encontraba disperso y dependía de cada centro directivo. De esta forma, la mayoría de los vehículos dejan de estar vinculados a una consejería o departamento concreto y pasan a depender de los edificios públicos de la Comunidad Autónoma para ahorrar gastos y unificar servicios o los traslados de los directivos y funcionarios a los aeropuertos por viajes oficiales.

La última adquisición de vehículos de alta gama tuvo lugar hace dos años y la acometió el entonces vicepresidente y consejero de Economía y Hacienda, José Manuel Soria. El BMW adquirido entonces es el que utiliza ahora el presidente Paulino Rivero.