Como un filete de aceite de oliva, así podríamos describir la más revolucionaria propuesta de la industria cárnica hecha la pasada semana por la empresa tinerfeña Vara del Rey, una idea que a buen seguro cambiará a partir de ahora el concepto de que comer carne no es saludable.
Sorprendente tanto por su sabor y aroma, como por su textura tierna y muy jugosa, esta novedosa carne tiene una inusual riqueza en los codiciados Omega 3, lo que la convierte en un alimento saludable. Procede de reses seleccionadas que disfrutan de pastos finos y una dieta rica en semillas de lino en su retiro en el Valle de Alcudia, paraje de gran valor natural situado en Toledo, donde los propietarios tienen la finca donde crían los animales que más tarde despiezan y comercializan en Tenerife y Gran Canaria, en sus tiendas Pasto y Bellota.
Con un show cooking oficiado por un nutrido equipo de cocineros, capitaneados por Diego Schattenhofer, chef de origen argentino afincado en Tenerife, el novedoso ingrediente fue protagonista de un menú estrecho y largo que causó sensación entre los asistentes.
Entre los beneficios más destacables de esta carne se encuentra la composición de su grasa, que la hace más digestible, con un perfil lipídico mucho más cerca de una ración de pescado. Está especialmente destinada a aquellos consumidores que demandan y están preocupados por su salud y la calidad de lo que se llevan a la boca, pues al tener un alto porcentaje de ácidos grasos insaturados, puede llegar a prevenir enfermedades cardiovasculares y proteger a las arterias.
En numerosas pruebas con la carne de Omega 3 de Vara del Rey, se demostró que también tenía un alto porcentaje de ácido oleico (el ácido graso principal del aceite de oliva), llegando incluso a un 40% (tomando de referencia el valor que alcanza este ácido graso en el aceite de oliva, que es del 70%).
