El Gobierno central ultima a lo largo de esta semana el proyecto de ley de Presupuestos Generales del Estado para este mismo año que tiene en Canarias un argumento clave de discusión y en los dos partidos nacionalistas canarios, CC y NC, como apoyos imprescindibles para su aprobación definitiva en el Congreso junto al de Cs y el PNV, como ya ocurriera en los de 2017. El Ejecutivo presidido por Mariano Rajoy aprobará el nuevo proyecto de cuentas estatales en un Consejo de Ministros extraordinario el próximo día 27, que remitirá a la Cámara baja el 3 de abril, mientras trata de enfilar las negociaciones con todos los partidos que le apoyaron hace casi un año para lograr al menos los 175 votos que necesita antes del debate de las enmiendas de totalidad, previsiblemente en torno al 20 de abril.
Hasta la fecha, Rajoy únicamente tiene garantizado el apoyo de CC y de su única diputada en el Congreso, Ana Oramas, convirtiéndose este partido así en el aliado más cercano a un Gobierno central enormemente debilitado por las protestas ciudadanas y por su extrema soledad parlamentaria. De hecho, en los últimos días, nacionalistas y populares han intensificado los contactos de cara a cerrar la ficha financiera de las Islas en las próximas cuentas estatales antes de que el Consejo de Ministros remita el proyecto al Congreso.
Según distintas fuentes, tanto desde el ámbito parlamentario, como desde el Ejecutivo regional, se han mantenido reuniones con el equipo del ministro de Hacienda y Función Pública, Cristóbal Montoro, y representantes de otros ministerios para "cerrar flecos" en la mayoría de las cuestiones que ya estaban pactadas de antemano, así como para tratar de concretar la primera anualidad del nuevo convenio de carreteras, uno de los ejes del acuerdo presupuestario. Esta situación coincide además con la nueva etapa de acercamiento entre el PP y CC en las Islas y los acuerdos alcanzados entre ambas formaciones en relación con los cambios en distintos organismos canarios y dependientes del Estado.
Sin contactos con NC
Por su lado, NC asegura que las negociaciones con el Ejecutivo central para abordar los Presupuestos aún no han comenzado y limitan los contactos con Rajoy y su entorno a la reunión del pasado 5 de febrero en la Moncloa por porte del presidente de la formación Román Rodríguez, y su diputado nacional, Pedro Quevedo, básicamente para perfilar la tramitación del REF económico en el Congreso. En todo caso, el PP no tiene prisa en tratar de sumar a Quevedo a la negociación porque da por seguro que éste presentará enmienda a la totalidad y apoyará en primer término la devolución de los Presupuestos, y que podrá negociar con él durante la tramitación y antes de que su voto sí sea imprescindible para la aprobación definitiva del proyecto al convertirse en el escaño 176, como en las cuentas del 2017.
Los dos grupos nacionalistas canarios van a poner sobre la mesa la subida de las pensiones, aunque no han concretado aún en qué términos. Ambas formaciones considera insuficiente la oferta hecha por Rajoy la semana pasada para subir por encima del 0,25 % previsto las pensiones mínimas y las de viudedad, pero tampoco van a ir a posiciones maximalistas.
CC ya planteó al ministro Montoro subir el 10 % las no contributivas y vincular al IPC las pensiones más bajas, pero aceptará una mínima mejora sobre lo anunciado inicialmente por el Gobierno. Desde NC se sumarán también a la reclamación generalizada para garantizar el poder adquisitivo de los pensionistas, pero no condicionarán un posible acuerdo a esta cuestión dado que se trata de un debate de carácter general que debe comprometer a todos los partidos.
Más allá de las posiciones de los dos partidos canarios, el Gobierno central se mantiene aún sin abrir formalmente las negociaciones con sus otros dos socios del 2017, Ciudadanos y PNV. Con ambos partidos hay acuerdos verbales en materia económica y presupuestaria, pero pendientes de que se despejen las cuestiones políticas que bloquean la negociación. El partido naranja reclama que se aparte de su escaño a la senadora del PP Pilar Barreiro por su imputación en el caso Púnica, y los nacionalistas vascos que se retire la aplicación del 155 en Cataluña. El Gobierno confía en superar esos escollos en ambos casos para antes de la votación decisiva de las enmiendas de totalidad dentro de un mes.
Compromisos a incluir
Además de la subida de las pensiones, aún por concretar, el proyecto presupuestario incorporará como novedades, en parte gracias al acuerdo verbal pactado hace meses con Cs, una rebaja en el IRPF a los contribuyentes que ganen menos de 14.000 euros al año; una prima fiscal para los pensionistas de más de 80 años una rebaja del IVA a la industria cinematográfica desde el 21 % actual al 10%; una mejora salarial a los funcionarios del 1,75 % este año en el marco de un plan de subida del 8 % hasta el 2020; la equiparación de sueldos de la Guardia Civil y el Cuerpo Nacional de Policía a los de las policías autonómicas; elevar la inversión en I+D+I; o una deducción de 1.000 euros para plazas de escuelas infantiles de 0 a 3 años.
También se contempla en el poyecto el incremento de las entregas a cuenta a las comunidades autónomas hasta alcanzar una cifra récord de 105.000 millones, marco en el que Canarias verá ratificada la exclusión de los recursos del REF del sistema de financiación, ya contemplado por primera vez en las cuentas del 2017, y percibirá por tanto una cantidad adicional de en torno a 260 millones.
