Nueva Canarias (NC) negó ayer que los presupuestos de la Comunidad Autónoma para 2019 sean sociales. "Es falso", aseguró el presidente y portavoz parlamentario de NC, Román Rodríguez, que anunció que su partido presentará en la Cámara una enmienda a la totalidad "como un castillo".

"Estos presupuestos merecen una enmienda a la totalidad como un castillo", señaló Rodríguez, que aseguró que el texto está repleto de "trampas" y que los responsables, Coalición Canaria, Partido Popular y Agrupación Socialista Gomera, pretenden "engañar a la gente".

El portavoz parlamentario se mostró de acuerdo en rebajar los impuestos a las rentas bajas y a los productos de consumo básicos pero está en contra de la eliminación de los impuestos sin criterios de proporcionalidad. Rodríguez considera que las rentas más altas, los productos de lujo y la tasa turística tienen que verse afectadas por una subida de los impuestos, ya que "si la fiscalidad no es progresiva es injusta". Al hacer cálculos para conocer el ahorro que supondrá para los canarios la supresión del IGIC del consumo energético, el portavoz de Nueva Canarias destaca que se ahorrará menos de un euro al mes (diez euros al año), lo que "no le resolverá la vida a nadie". Y en los productos de consumo básico ocurre lo mismo, "el ahorro será de dos euros al año". En cuanto al impuesto de donaciones y sucesiones, Rodríguez remarcó que este debería ser discriminatorio y aumentar en base a la proporción de las herencias.

Rodríguez afirmó que "no se apuesta por el gasto social" y que sanidad y educación están marginadas. La sanidad pública, que aumenta en un 2,6%, crecerá cuatro puntos menos que la media de los presupuestos totales y de los 77 millones disponibles para el sector solo cinco se destinarán a inversiones. La educación, por su parte, sube un 4,1 %, dos puntos y medio menos que el total del gasto. Del lado contrario, las inversiones sufren un incremento potencial de manera "exagerada", en palabras de Rodríguez. Los 1.077 millones más los posibles 450 millones que vendrían de la firma de los convenios pendientes con el Estado suponen una gran parte del presupuesto de los que "no se ejecutarán ni un tercio".