Crece el nerviosismo en las filas del PP de Canarias por el retraso en la confección de las listas al Congreso y al Senado para la cita electoral del 28 de abril. Pasan los días y los aspirantes siguen pendientes de que la dirección nacional deshoje la margarita sobre los nombres que deben integrar las planchas en las elecciones generales. Aunque en teoría hay una "total sintonía" entre el presidente regional, Asier Antona, y la dirección nacional, el " absoluto mutismo" con que está actuando la cúpula de la calle Génova, en expresión del propio líder canario, impide avanzar en el proceso y dar por asumidas las propuestas que se están haciendo desde las Islas. De momento, no hay fecha para que el comité electoral autonómico, que propone formalmente los candidatos al comité nacional, se reúna y designe a los cabezas de lista de cada una de las provincias.

Se da por hecho desde el PP canario que Guillermo Mariscal por Las Palmas, y Ana Zurita por Santa Cruz de Tenerife, encabezarán cada una de las listas, pero no hay confirmación al respecto ni tan siquiera de manera oficiosa. El caso de Mariscal está menos sujeto a especulaciones porque es el hombre fuerte en las Islas del actual presidente nacional, Pablo Casado, de cuyo equipo de confianza forma parte, además de ser miembro del comité electoral nacional. Zurita, sin embargo, es uno de los nombres sobre los que debe pronunciarse el propio Casado. Antona habló la semana pasada, y lo hizo ayer de nuevo, con el secretario general nacional, Teodoro García Egea, y pese a confirmarse esa "sintonía" entre ambos respecto a los perfiles de los candidatos, no hay nada cerrado.

La cosa se complica aún más para el resto de los puestos de salida, entre otras razones porque hay un serio riesgo de que el PP pierda alguno de los seis escaños que logró en las lecciones de 2016, tres por cada provincia. El hecho de que esa tercera posición no esté asegurada complica el proceso y hace dudar a los aspirantes si competir por ellas o apostar por algún puesto para el Senado. Antona reconoció ayer que tanto las elecciones del 28-A como las del 26-M se celebran en un "panorama convulso, confuso y enrarecido".