Tras tres horas y media de reunión, la dirección de la Agrupación Socialista Gomera (ASG) desveló anoche, que se inclina, quizás solo levemente o hasta como señuelo, por un acuerdo de izquierdas en las Islas, aunque dejando claro que deja abiertas otras alternativas. Bajo el título de "ASG abre la vía al pacto progresista sin renunciar a otros posibles acuerdos".

El partido que lidera Casimiro Curbelo recalca cuál es una de las principales premisas para que esa opción con el PSOE, Ny Sí Podemos Canarias fructifique: que los socialistas reviertan lo ocurrido en el municipio de Valle Gran Rey, donde ASG logró el 41% de los votos, cinco ediles (a uno de la mayoría absoluta) y viendo frustrado su gobierno tras un pacto que dio la Alcaldía al PSOE (2 ediles) con el respaldo de Sí Se Puede (otras dos actas) y de NC (2).

Pocas horas antes, el líder socialista, Ángel Víctor Torres, anunció la apertura de un expediente de expulsión a estos dos concejales y hasta le dio mayor relevancia y gravedad a esta "indisciplina" que a la del grupo en Tacoronte, al que también se expedienta.

Los de Curbelo en una nota apelan al diálogo para "llegar a los consensos que posibiliten un Gobierno estable y que se trabaje pensando en los vecinos de Valle Gran Rey, lejos de aritméticas e intereses partidistas". ASG pretende "avanzar en las negociaciones para sellar un pacto que aporte estabilidad a Canarias: "Se ha decidido mantener todas las vías de negociación abiertas para llegar a acuerdos, especialmente con el bloque progresista", dicen.

La formación recalca la parte programática "pensando en los servicios esenciales como la sanidad, la educación y las políticas sociales". La nota alude a los resultados de ASG, que cree muy relevantes por su mayoría absoluta en el Cabildo (la única en las Islas), las tres actas regionales y las alcaldías de San Sebastián, Vallehermoso, Hermigua y Agulo, donde Rosa Chinea logró 8 de 9 ediles.