Ignacio González Martín, el empresario palmero que falleció este lunes en la fría cárcel Tenerife II, donde cumplía condena por el conocido como c aso Las Teresitas, será enterrado hoy en el cementerio de Santa Lastenia de Santa Cruz. Allí reposarán los restos de un hombre, emprendedor nato, que emigró cuando aún era un adolescente a Venezuela y que hizo fortuna a su regreso. Durante seis años llevó las riendas del Partido Popular (PP) de Tenerife y ya al final de su vida fue condenado por malversación de caudales público por la compra fradulenta del frente de la capital tinerfeña. En la prisión de Tenerife II debía pasar cinco años y tres meses. Murió ocho meses y medio después de su ingreso con un informe de los forenses que acreditaban que la salud del empresario no se resentiría en la cárcel, pese al visible deteriorio.

Una pequeña muestra de toda esa vida empresarial y política pasó ayer por su velatorio, en el tanatorio de Servisa. Conocidos empresarios y políticos, además de amigos, compartieron desde media tarde el dolor por el fallecimiento del otrora también presidente de la Cámara de Comercio de Santa Cruz de Tenerife.

Entre las caras conocidas, la del expresidente del Gobierno de Canarias, ahora senador por la Comunidad Autónoma, Fernando Clavijo (CC). "Fue uno de esos hombres que contribuyó a construir esta tierra y que generó mucho empleo en las Islas".

Antes que él llegaron los familiares, entre ellos Ignacio González hijo, expresidente del Centro Canario Nacionalista (CCN), alejado desde hace un tiempo del foco mediático.

La entrada de Clavijo, que acudió solo a las instalaciones, coincidió con la salida de otro viejo conocido de la política tinerfeña, el exconsejero insular de Museos, Francisco García-Talavera Casañas.

Vinculado a González por un parentesco con su mujer, relató al salir, con cierta tristeza, la rabia que invadía a la familia del empresario por cuestiones "poco humanas" relacionadas con su estancia en la cárcel. Por un lado, lamentó que tuvieran que enterarse de la muerte del empresario a través de los medios de comunicación y, por otro, criticó que no se diera respuesta a tiempo a la petición de la familia para que Ignacio González fuese atendido en un centro hospitalario fuera del centro penitenciario.

Según indicó García-Talavera, el expresidente de la Cámara de Comercio tinerfeña vio agravada su dolencia por la baja temperatura que se registra en la zona en la que está emplazada la cárcel, en el municipop de El Rosario. Pese a ello, no pudo abandonar el centro. De hecho, durante los últimos días estaba aquejado de una grave afección pulmonar (bronquitis). Sin querer asegurarlo, dejó entrever que cabe la posibilidad de que la familia denuncie este caso a través de la vía judicial.

También se despidió de González Martín quien fuera su sustituto al frente de la Cámara de Comercio tinerfeña, José Luis García, y el expresidente del Club Deportivo Tenerife Víctor Pérez-Ascanio, entre otros. Por el tanatorio, antes incluso de que estuviera abierta la sala correspondiente, pasó también Wladimiro Rodríguez, exconsejero del Cabildo de Tenerife.

A todos ellos se sumaron, a lo largo de la tarde-noche, otras caras menos conocidas relacionadas, sobre todo, con el mundo empresarial y con la trayectoria de sus hijos.