El presidente de Vox, Santiago Abascal, ha culpado este viernes al Gobierno de llamar a los inmigrantes, apuntando que ello ha llevado a que en Canarias la situación "cobra tintes de invasión por sus números", al tiempo que ha pedido al Ejecutivo central que utilice todos los mecanismos necesarios para frenar la situación migratoria, entre ellos, el que la Armada detenga las pateras antes de entrar en aguas españolas.

Así lo ha manifestado Abascal en declaraciones a los periodistas tras asistir a la manifestación 'Salvemos el turismo' en la localidad de Puerto Rico, en Mogán, y que convocan colectivos del municipio que piden, entre otras cosas, sacar a los migrantes de los complejos turísticos en los que están alojados debido a la llegada masiva de personas irregulares a la isla de Gran Canaria.

De este modo, el líder de Vox ha querido estar en la misma, dijo, para "darles voz, para representar su sentir, para decir que al final es a las personas más sencillas, es a los trabajadores a quién más está afectando la inmigración ilegal", mientras ha criticado "los políticos, los poderosos, todos aquellos que han contribuido al efecto llamada, no tienen que padecer la consecuencia que la inmigración ilegal tiene sobre la seguridad, sobre la convivencia, sobre los distintos conflictos, sobre la propia prosperidad, que hoy está suponiendo un drama" en Canarias.

En este sentido, apuntó que Canarias "hoy se desangra por culpa de la inmigración ilegal a la que han llamado insistentemente los políticos de todos los partidos, produciendo un efecto llamada que hay que detener", de ahí que incidió en la necesidad de que el Estado ponga "todos los mecanismos para detener de una vez por todas la inmigración ilegal, que ha llegado porque se le ha llamado".

Al respecto, aseguró que "no" culpan a los inmigrantes, sino "a los políticos españoles, a los políticos europeos, que les llaman, que les hacen jugarse la vida en los mares, que les prometen un falso paraíso que no" se puede ofrecer.

Por ello, incidió en que el "deber de cualquier Estado es proteger en primer lugar a sus nacionales, que la inmigración debe ser regulada en función de la economía nacional y de la capacidad de adaptación de los inmigrantes", algo de lo que matizó saben "mucho" en Canarias, que "ha acogido a las verdaderos refugiados, aquellos hermanos venezolanos que huyen de la tiranía de Maduro".

Así, exigió "deportaciones inmediatas de todos" los que entren ilegalmente en España, así como que se lance el "mensaje nítido en África de que todo el que entre" en España, "jamás podrá ser regularizado", y que el Estado "utilice todos los medios a su alcance, también el control marítimo con la Armada para detener" a las embarcaciones antes de que entren en aguas españolas y sean llevadas al puerto seguro más cercano de Marruecos, de Argelia o de Mauritania, para que sean estos países los que asuman la "presión internacional porque no cumplen con los convenios internacionales de salvamento marítimo".

Para Abascal la solución pasa porque España y Europa devuelvan la presión a los países que "están mandando la inmigración de forma masiva e ilegal".