El Ayuntamiento de Mogán condenó ayer la marcha de un grupo de vecinos hasta las puertas de un complejo turístico del municipio grancanario que alberga inmigrantes para protestar por su estancia allí, argumentando su rechazo en el “uso de la violencia, así como de todo discurso que incite al odio”.

La alcaldesa de Mogán, Onalia Bueno, señaló en nombre de su equipo de Gobierno que “rechazan las formas empleadas por los vecinos participantes en este episodio”, al tiempo que “solicitan, tanto a estos como al resto de la población del municipio, actuar con responsabilidad y mantener la calma”. Matiza que es “consciente” de que la situación es “compleja” y que “este brote de irritación puede ser efecto de más de cuatro meses de tensión acumulada por los vecinos desde que comenzó la crisis migratoria”, pero apostilla que eso “no justifica lo ocurrido” y subraya que “la violencia y el odio nunca son la respuesta”.

Recuerda la alcaldesa que “el Consistorio continúa trabajando para lograr que las zonas turísticas recuperen su actividad natural y así poner en marcha el turismo, principal motor económico de la isla”, y que para ello ha instado a que estos establecimientos dejen de acoger a inmigrantes.

De hecho, Bueno ha comunicado ya a los complejos de apartamentos y hoteles del municipio que alojan a inmigrantes que deben cesar de hacerlo, como máximo, el 31 de diciembre, y que, de lo contrario, se les abrirá un expediente sancionador por incumplimiento de la legislación turística, especifica el escrito. La alcaldesa aprovecha, al tiempo, la oportunidad para reiterar que solicita al Estado que estos inmigrantes sean reubicados en instalaciones públicas “debidamente acondicionadas”.

Pese a estas consideraciones, Nueva Canarias (NC) cree que Onalia Bueno está haciendo una “utilización política de la crisis migratoria” y que su discurso al respecto “no hace sino echar gasolina a una situación cuya vertiente mas violenta se manifestó el sábado”, cuando vecinos de su municipio protestaron ante unos apartamentos que albergan personas llegadas en pateras o cayucos.

Una acción ante la cual NC manifiesta “su más profundo y enérgico rechazo contra el uso de la violencia y contra el uso de discursos de incitación al odio contra los inmigrantes”.

Ayer llegaron dos nuevas embarcaciones a las Islas. En total 74 migrantes. Un dispositivo de emergencia atendió a los 49 migrantes ocupantes de una embarcación que arribó por sus propios medios hasta el puerto de la Restinga, en la isla de El Hierro.

Además, otra patera con 25 personas de origen magrebí fue rescatada y llevada a por la guardamar Concepción Arenal al muelle de Arguineguín, en Mogán.