La Fiscalía Provincial de Santa Cruz de Tenerife plantea la necesidad de disponer de un canal eficaz de información entre las organizaciones no gubernamentales (ONG) que trabajan con personas migrantes para que avisen lo antes posible de aquellos casos en que pueda haber menores de edad entre adultos, según informa El Día.

Para abordar este asunto, ayer se produjo una reunión en la que estuvieron la fiscal jefe de Santa Cruz de Tenerife, María Farnés Martínez Frigola; Manuel Campos Davó, fiscal decano de la Sección de Menores, y Carolina Barrio Peña fiscal delegada de Extranjería con representantes de la asociación Accem, que gestiona el campamento de acogida de Las Raíces; Cruz Roja Española y Organización Internacional de las Migraciones (OIM), que se encarga de la administración del campamento de Las Canteras.

El objetivo del encuentro fue articular un mecanismo para canalizar y agilizar la información que debe remitirse al Ministerio Público, para que este pueda iniciar los tramites necesarios con el fin de que, en el menor tiempo posible, puedan llevarse a cabo las pruebas precisas para determinar la edad de quienes afirman tener menos de 18 años y que en estos momentos se encuentran en los centros que dichas entidades gestionan. Mediante esta medida de agilización, desde la Fiscalía se busca que, lo antes posible, se puedan adoptar las medidas adecuadas acordes a la edad de cada persona. Esta petición de mejorar la comunicación que se propone desde el Ministerio Público no es baladí y se produce justo después de que esta semana se haya registrado una nueva polémica con un grupo de migrantes magrebíes y subsaharianos que afirman ser menores de edad e iban a ser trasladados hasta el campamento de acogida de Las Canteras desde el hotel Concordia, en el Puerto de la Cruz.

La mitad de los 140 migrantes que estaban en la lista aceptaron desplazarse hasta el referido centro. Pero el resto se negó a subirse a las guaguas. Gracias a la mediación de la Asociación de Apoyo a Migrantes de Tenerife, los fiscales Manuel Campos y Carolina Barrio tuvieron que actuar de emergencia otra vez. Y se activó a la ong Asociación Coliseo, que tenía capacidad para acoger a una veintena de migrantes que dicen ser menores en sus instalaciones de un campin de La Esperanza, donde la primera noche fueron alojados en un aula.

Respecto a los 41 jóvenes restantes, pasaron la noche del martes al miércoles al raso delante del hotel Concordia, pues ya no tenían opción de regresar a las habitaciones en las que estuvieron hasta esa jornada. El miércoles, todos fueron trasladados hasta el campamento de Las Canteras, precisamente el lugar al que no querían ir. Algo similar ocurrió con cuatro supuestos menores en febrero, cuando la Fiscalía impidió su ingreso en Las Raíces y se les trasladó a otro recurso. A estos migrantes que dicen ser menores se les abre un expediente para conocer su edad real y saber a qué recurso deben derivarlos.