Es la primera vez que viene a Gran Canaria a competir. ¿Qué conoce de la Isla?

Entrené a tres jugadores que habían estado aquí, Kyle Kuric, Juan Tello Palacios y David Patrick. Me hablaron muy bien de la Isla, de su gente, el clima...

Kuric es un jugador muy querido en el club. ¿Habló con él sobre el Granca?

Sí, claro. Justo estuve hablando con él ayer [por el miércoles]sobre lo que estaba haciendo en Barcelona y lo que tenía que decir de la Isla [ríe].

¿Y qué le recomendó?

Es una plantilla diferente a la que tenían cuando él estaba aquí. Ahora es un equipo muy bueno tirando, que intenta meter muchos puntos. Además, muestra muchos estilos diferentes de defensa

Kuric fue operado de un meningioma hace dos años. ¿Contactó con él?

Fue un momento bastante duro. Nosotros, todos los amantes del baloncesto, creo que nos sentimos profundamente preocupados por él, era un asunto muy complicado. Esperábamos que en cualquier momento nos llegaran noticias sobre su recuperación. Durante un partido de los Cardinals apareció en las pantallas del pabellón desde la cama del hospital para dar un mensaje sobre su recuperación a las 20.000 personas que estaban en el partido... Fue muy emotivo todo [en este momento, Pitino se muestra especialmente sensible].

¿Qué diferencias ha encontrado entre el baloncesto europeo y el americano?

El estilo de juego de la Euroliga es lo más parecido a lo que la gente llamaba baloncesto. Eso que aprendes desde pequeño. Pero pasa con todos los jugadores de la competición, tengan 25 o 35 años.

En su presentación dijo que había elegido ir al Panathinaikos porque tiene 66 años y no quiere "parar de aprender". ¿Qué es lo que le ha enseñado Europa?

Aquí tengo que ser un tipo de entrenador diferente. En Europa el estilo de vida es muy diferente al que tenía en Estados Unidos. He aprendido incluso la rivalidad que existen entre los aficionados. Algo que no se ve en Estados Unidos. Para mí, ahora el Olympiacos es al que tengo que tener un odio real porque el Panathinaikos tiene que ganarles, siempre [ríe]. Me llama la atención la cultura griega.

Se caracteriza por ser un entrenador defensivo. Entonces, ¿cree en lo que ahora llaman baloncesto moderno, el run&gun ? Porque en Europa se dice que en la NBA no se defiende y que los equipos solo tiran de tres...

Originalmente fui uno de los entrenadores que no hacía excepciones con los triples. Fuimos los primeros en dejar que los jugadores buscaran su tiro de tres con los Bambinos de New York Knicks, porque así tenían diferentes opciones para jugar. Además, tienes que ser consciente de que el juego cambia radicalmente cuando tienes a Kareem Abdul-Jabbar, Hakeem Olajuwon o Shaquille O'Neal en tu equipo. No te queda otra que jugar para ellos si dominan con claridad el poste bajo y eso te da infinidad de opciones de victoria. Hoy esos jugadores no existen y no los habrá más, por lo que ahora los equipos se concentran más en tirar de tres si todo el campo está abierto. Aun así, creo que en la Euroliga el juego es más físico que el de la NBA.

Son claras las diferencias, pero el último MVP de la Euroliga, Luka Doncic, se marchó a la NBA y ahora el líder de los Dallas Mavericks. ¿Qué opinión tiene del esloveno?

Es un jugador fantástico y es solo su primer año. Está claro que puede hacer todas las cosas que está demostrando en Dallas porque tiene un gran talento. Creo que los buenos jugadores de la Euroliga pueden hacerlo bien en la NBA. Y bueno, los que no llegan a ese nivel, siempre pueden disfrutar de esta competición, que es la NBA en Europa. Es una liga fenomenal.

Por último, ¿cómo es Dimitrios Giannakopoulos, el dueño del Panathinaikos?

Todavía no le he visto.

¿De verdad, nunca?

Bueno, le he visto en los partidos algunas veces. Como unas dos o tres veces. Pero, de verdad no le he visto mucho más.