Demonte Harper anotó 25 puntos, cazó seis rebotes y dio tres asistencias ante el Obradoiro el pasado domingo en una de sus mejores actuaciones en el Gran Canaria Arena. "Me sentía muy bien en la pista, aunque acabé exhausto. Hubo mucho ataque a la canasta y el equipo se esforzó al máximo y jugó muy bien", aseguró.

El escolta de Tennessee fue el faro amarillo durante la prórroga ante los gallegos. El balón no le quemaba y sus compañeros se encomendaban a él para abrir espacios. "Trabajamos toda la semana, Obradoiro nos puso un reto muy difícil. Todos estábamos enfocados en jugar agresivos, en ser duros en defensa. Creo que logramos ceñirnos al plan y salimos ganando".

Harper se vació durante todo el partido, hasta los últimos segundos. Logró un robó en los instantes finales que terminó con un triple de Costello que dio la victoria a los claretianos. "Me esforcé en mantenerme centrado todo el partido, la ACB es una liga complicada ya que todo rival nos va a poner las cosas difíciles. Por suerte, ante Obradoiro nos salieron las cosas mejor", detalló.

Trabajo del cuerpo técnico

El americano subrayó que el equipo tenía un plan para hacer frente a Obradoiro, que pasaba por una defensa férrea y cerrar los espacios para los lanzadores, como Magee, que tuvo que atreverse con lanzamientos lejanos. "El cuerpo técnico trabaja toda la semana para preparar los partidos de la mejor forma, nosotros tratamos de seguir el plan durante todo el partido para tener opciones de lograr la victoria".

Además, el escolta puso en valor el trabajo de todos sus compañeros. "Somos doce jugadores y cada uno puede aportar en cada momento. Todos tienen ganas de que las cosas salgan bien", afirmó.

Por otra parte, reconoció que echan en falta a Omar Cook y Xavi Rabaseda. "Cook es nuestro asistente, es quien elabora nuestro juego. Está claro que echamos en falta sus asistencias. Y Xavi también es un jugador clave para nosotros", indicó Harper, que espera que ambos puedan disputar minutos en el derbi ante el Iberostar Tenerife.