La ‘pintura’ del Dreamland Gran Canaria disipa las dudas tras la reestructuración

La marcha este verano de Olek Balcerowski, Khalifa Diop y Damien Inglis suponía un duro golpe para la planificación del nuevo proyecto del Dreamland Gran Canaria, el segundo con Jaka Lakovic en el banquillo. El primero, el del pasado curso, se había basado en gran medida en el físico y las características de tres jugadores vitales en el juego interior de la escuadra claretiana. 

Una de las incógnitas en el inicio del curso 2023-24 era saber si los jugadores fichados para sustituirles mantendrían el poderío de sus antecesores en la pintura. Por lo visto en el duelo inaugural de la Liga Endesa, que se saldaba con victoria el pasado domingo frente al Baxi Manresa, las dudas quedaron disipadas.

Ethan Happ, Ben Lammers y Pierre Pelos, los nuevos refuerzos, cumplieron con creces en su debut oficial ante un adversario que les sometió a un duro examen, del que supieron salir airosos. Menos protagonismo tuvo Roko Prkacin, que contó con un papel secundario -algo menos de seis minutos en pista-.

Ethan Happ, con un 25 de valoración, actuó cerca de 20 minutos para acabar siendo el mejor valorado del encuentro, aportando 13 puntos, siete rebotes y dos asistencias. El de Illinois, cuyos números en el Breogán le situaron al final de la campaña pasada como el tercer jugador más valorado de la Liga Endesa, el máximo reboteador y el mejor en recuperaciones de balón, destacaba en el estreno con la camiseta del Dreamland Gran Canaria por sus recursos técnicos y su inteligencia a la hora de leer el juego; esto, unido a su capacidad para asociarse, le convierten en un rival muy difícil de defender.

Su compañero en el puesto de cinco, Ben Lammers, estuvo ante el Baxi Manresa algo más de 15 minutos sobre el parqué. En ese periodo de tiempo, demostró ser un jugador mucho más físico que Happ. Si este último exhibía sus dotes tácticas y técnicas, su compañero imprimía carácter en la pintura. El pívot texano aportó cinco puntos, cinco rebotes y dos asistencias, para terminar con una valoración de 14 en su estreno oficial con los claretianos.

En cuanto al papel de Pierre Pelos, el ala-pívot francés dejó mejores sensaciones que números. En los casi 15 minutos que actuó frente al conjunto manresano, aportaba ocho puntos, cinco rebotes y una asistencia, para una valoración de 13. Más allá de esos guarismos, el galo supo aportar en determinados momentos un extra de energía al equipo tanto en defensa como en ataque. Dejó destellos de ser una pieza clave para apuntalar este juego interior del Granca, al que todavía le falta acoplarse y adquirir los automatismos necesarios para funcionar como un reloj.

Superado con buena nota el primer examen, ahora los nuevo componentes del juego interior del Dreamland Gran Canaria deben refrendar su adaptación en los dos duelos que el cuadro claretiano debe afrontar esta semana, ante el Girona (jueves) y el Joventut (domingo).

Se trata de dos pruebas exigentes que ayudarán al técnico Jaka Lakovic a seguir engrasando la maquinaria de un equipo que se ha visto obligado a cambiar su forma de jugar, al cambiar músculo por inteligencia, Una propuesta que de momento parece dar buenos resultados.

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