El escultor Juan Antonio Giraldo y el crítico, compositor y periodista Guillermo García-Alcalde, ingresaron ayer como académicos numerarios en la Real Academia Canaria de Bellas Artes de San Miguel Arcángel, en una sesión pública solemne celebrada en el Salón Dorado del Gabinete Literario, y la que asistieron numerosas personalidades de la vida pública, social, cultural y empresarial.

Presidida por el titular de la Real Academia, Elizeo Izquierdo, la sesión dio comienzo con el Pasaclaustro de ingreso que interpretaron los Ministriles de la Real Academia. El secretario accidental de la institución, Francisco González, leyó el acuerdo de elección del escultor como miembro de la Real Academia, mientras que el musicólogo Lothar Siemens fue el encargado de leer el laudatio sobre la figura de Juan Antonio Giraldo. Un artista al que calificó como "uno de los mejores escultores de su generación" recordando que fue en el año 1968 cuando se vinculó con Gran Canaria fijando su residencia en la localidad de Tafira.

El musicólogo citó algunas de las grandes obras que Giraldo realizó en esta isla durante las décadas de los setenta y ochenta, y señaló que desde el principio éste trabajó con diversos materiales, ya fuera escayola, bronce o hierro.

Siemens recordó que a mediados de los setenta, Giraldo se especializó en esculturas de pequeño formato hasta que 1976, fecha crucial en su carrera, presentaba su exposición en la sala Vegueta de Las Palmas. "Causó un gran impacto", apuntó Siemens, "por su enorme carga poética y porque su obra muestra un paralelismo con una preocupación constante tanto por el ser humano como por lo cambiante de su condición". Para finalizar, Siemens recordó que, a apesar de ser manchego, a Giraldo se le considera como un canario más, y calificó su entrada en la Real Academia Canaria de Bellas Artes como todo "un acontecimiento". Juan Antonio Giraldo entregó a la institución la escultura Don Quijote como agradecimiento a la vez que agradeció la distintinció que le dispensó la Academia.

A continuación, el secretario accidental leyó el acuerdo de elección de Guillermo García-Alcalde como miembro numerario . El musicólogo y periodista pronunció su discurso de ingreso centrado en Wagner en el siglo XXI . García-Alcalde, entre otras cuestiones, recordó la importancia que están teniendo las nuevas tecnologías en el mundo de la ópera y las últimas puestas en escenas de las obras del compositor germano en el circuito internacional. Seguidamente, la académica Rosario Álvarez Martín pronunció el discurso de contestación en el que destacó la figura de García-Alcalde como un crítico musical de prestigio, una labor que calificó como muy importante ya "que nos lleva a valorar las obras, tendencias, escuelas y versiones ante la escasez de un criterio musical". Álvarez señaló que un crítico musical debe tener cultura, perspicacia y humildad y destacó su faceta como periodista de vocación y compositor no profesional.

Álvarez destacó la vinculación de García-Alcalde con Canarias desde hace 36 años y repasó su trabajo en distintos medios de comunicación asumiento simepre diferentes responsabilidades. Álvarez también destacó el hecho de que García-Alcalde haya escrito sobre los mejores compositores internacionales, además de profundizar en los músicos y creadores canarios.