La Sociedad Científica El Museo Canario saca a subasta un inmueble de la capital grancanaria, que le fue cedido por Unelco (hoy Endesa), en el año 1996, y cuya venta servirá para financiar la segunda fase de la ampliación del centro. La Sociedad se ha visto forzada a tomar esta decisión ante la imposibilidad del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria de pagar los tres millones de euros comprometidos en 2006 para el proyecto.

La primera fase de la ampliación del centro ya ha concluido y la Sociedad Científica quiere abordar ahora la segunda fase. "Hemos podido afrontar las obras hasta este momento porque tanto el Gobierno de Canarias como el Cabildo Insular han puesto su parte, tres millones de euros cada institución", explicó Diego López, gerente del Museo. "El problema es que ni la Corporación local anterior ni la actual pueden abonar el capital comprometido en 2006, y eso nos obliga a vender este edificio", añadió.

Esta subasta estaba prevista para costear las fases tercera y cuarta del proyecto, pero no será posible, según adelantó López. "La ampliación que acabamos de concluir no sirve de nada sin el resto, al menos necesitamos terminar la segunda y la tercera, porque se trata de cambiar todo el discurso expositivo. Nosotros somos conscientes, y por eso llevamos adelante esta iniciativa, de que tal y como está, el Museo necesita una profunda renovación, acorde con los fondos que posee y el potencial que tiene el estudio de nuestro pasado", indicó el gerente, que espera obtener éxito en esta empresa.

"Cuando Unelco, hoy Endesa, cedió el inmueble, con la condición de que tuviera un uso social, tuvimos llamadas interesándose por el edificio, veremos qué pasa ahora", adelantó López.

Histórico

El inmueble en cuestión fue construido por Salvador Cuyás entre los años 1918 y 1920, y han sido muchos los usos que ha albergado. "Primero fue domicilio particular de este consignatario mallorquín que tanto éxito tuvo aquí y que también es el que auspició la construcción de lo que hoy es el teatro Cuyás y de las recién derruidas casas de la cuesta de Mata", reveló.

Pero también fue un hotel y las oficinas de Unelco. "En la normativa municipal, que se puede consultar en la web del Museo, explica que se tiene que respetar la fachada. La verdad es que dentro no es aprovechable, porque está diseñado como oficinas, con mostradores, etc. Pero se pueden construir tres plantas más, aunque retranqueadas", detalla Diego López.

Las solicitudes para la subasta se deberán presentar en un sobre cerrado con una puja que nunca baje de 3,8 millones de euros, según el precio de tasación oficial.