El dibujante grancanario Javier Pulido (Telde, 1970) se consagra como uno de los ilustradores más destacados y personales de la editorial Marvel al conseguir revitalizar al personaje de Hulka, uno de los más queridos por los aficionado al cómic de superhéroes, en el primer volumen de Ley y desorden.
Pulido, que lleva trabajando en la editorial norteamericana desde 1998, es ya un experimentado ilustrador que realiza su trabajo en su estudio en la capital grancanaria, y que encara con solvencia los más dispares cómics de superhéroes que ya suman una veintena de títulos a sus espaldas siempre muy bien recibidos por los aficionados.
Por lo pronto, este Ley y desorden, que en España publica Panini, ya ha obtenido el aplauso unánime de la crítica especializada en Estados Unidos. Valga como ejemplo, el hecho de que la lista mainstream más importante de las webs sobre cómics americanos, Comicbook Resources, lo incluye entre los diez mejores títulos del año y recoja varias críticas entre las que se señala que "Javier Pulido ha producido imágenes que definen el buen momento de su carrera, saltando a un nuevo nivel de narrativa". La web Vulture, por su parte, lo coloca en la posición número cuatro de los mejores de 2014 y señala que "lo más importante ha sido el trabajo del artista Javier Pulido que se ha marcado un desafío para plasmar el mundo de la abogacía de forma visualmente emocionante, con una pieza de arte parecida a la de los Hermanos Hernández en lo más alto de sus capacidades: dobles páginas complejas, línea de trabajo expresiva, y excelentes expresiones faciales". Finalmente Newsarama también lo destaca entre lo mejor del año señalando que "las formas de sus dibujos son engañosamente simples y sus expresiones faciales precisas". Partiendo de estas referencias, cualquier aficionado al noveno arte que se precie, disfrutará con las nuevas aventuras de esta heroína que destaca por su originalidad dentro del amplio catálogo de la editorial norteamericana surgida en 1939. Un personaje que hasta el momento, había tenido una intensa e intermitente existencia, pero que, ahora, de la mano del guionista Charles Soule, y de los dibujos de Pulido junto al versátil artista Ronald Wimberly, cobra un nuevo y refrescante impulso. La firma responsable de personajes como Spiderman, Los Cuatro Fantásticos, Capitán América, Los Vengadores, Iron Man, Thor, Hulk, Daredevil, The Punisher, Silver Surfer y los X-Men, inicia una nueva saga cuyo convincente primer volumen promete nueva e intensas sorpresas
Como no resulta difícil adivinar, el origen de Hulka está indisolublemente ligado al de su equivalente masculino, Hulk. Fue creada por Stan Lee y John Buscema para aprovechar el tirón mediático de este y apareció por primera vez en noviembre de 1979 en una saga de 25 números. Su protagonista es Jeniffer Walters, hija del comisario de policía Morris Walters, y una importante abogada de Los Angeles que casualmente es prima del doctor Bruce Banner. Tras ser tiroteada por una banda de criminales que habían tenido percances con su padre, Jeniffer recibe una transfusión de sangre de Bruce, y las moléculas radioactivas de este generan una similar mutación en ella, confiriéndole poderes parecidos aunque menores a los de Bruce, así como una apariencia física semejante. Durante los siguientes años, Hulka aparecerá en algunos de los proyectos más interesantes de la editorial Marvel. Así, y por citar sólo un par de ejemplos, Roger Stern la introduce en las filas de Los Vengadores, y John Byrne la ingresa entre Los 4 Fantásticos.
Este nuevo volumen de Hulka está dividido en 6 capítulos. Con guión de Charles Soule y color de Muntsa Vicente, los cuatro primero los firma Javier Pulido, mientras que los dos últimos son de Ron Wimberly. Como es habitual en este tipo de aventuras, junto a Hulka aparecen numerosos superhéroes populares como El Hombre de Hierro, Gata Infernal, Dr Muerte, Daredevil, El Vigilante Nocturno, Tigra o El Conmocionador que, en un momento un otro, cobran especial protagonismo en la historia. La mayoría con una relación directa con la protagonista en el pasado.
Realizado con un gran sentido del humor, y de una forma ágil y entretenida, habría que destacar el hecho de que el propio guionista trabaje como abogado en Estados Unidos, lo que sirve para dar más consistencia a los retos profesionales de la protagonista. El primer episodio, Se abre la sesión, se inicia cuando Jen deja el bufete Paine y Luckberg SR en el que trabaja, al recriminarles sus jefes que no había cubierto las expectativas que habían depositado en ella al no haber conseguido clientes entre los superhéroes. Luego, Jen logra que Iron Man, antiguo compañero suya en Los Vengadores, se responsabilice de una deuda que tenía pendiente con una de sus clientas.
El segundo, ¿..Y?, cuenta el modo en que, Hulka, con el dinero obtenido en el anterior caso, se traslada a un nuevo despacho ubicado en un edificio de la ciudad cuya casera alquila a gente con poderes. Jennifer contrata a nueva secretaria llamada Angie y cuenta, nada menos, que con Gata Infernal como principal colaboradora. Su primer caso como autónoma tendrá que ver con el mismísimo Kristoff Vernard, el hijo de Victor von Muerte.
El tercero, El hombre que no quiso reinar, comienza con un recurso muy habitual de Marvel, que consiste en mostrar una viñeta de la mitad de la historia para prepara la acción. Con un tono agridulce que recuerda a populares sagas contemporáneas como Lobo, en esta ocasión Jen tiene que lograr asilo político para Vernard, que se niega a ser el futuro gobernador de Latveria en sustitución de su padre, el Dr Muerte. Hulka tendrá que luchar contra un ejército de muertebots e imponer su criterio en el juicio. Finalmente, el cuarto y último capítulo de Pulido, El abogado diligente, se desarrolla en la propia Latveria. El ilustrador grancanario incluye al final unos extras en los que muestra bocetos y entintados originales de estas aventuras.
Estas cuatro aventuras se complementan con Azul, que dibuja Wimberly, que aparece dividida en dos partes, y en las cuales se narra el inicio de una inquietante demanda contra superhéroes que tiene que defender la propia Jen.
La obra define muy bien el estilo de Javier Pulido, un autor de líneas muy definidas, influenciado básicamente por David Mazzuchelli y Steve Rude, que se maneja en una gran pericia al crea encuadres, línea y volúmenes complicados sin necesidad de recargar las viñetas como hacen otros ilustradores.
