Moda | Bridal Collection Gran Canaria Moda Cálida

Susurros románticos de color y amor para dar el ‘Sí quiero’

La firma Pomeline abrió ayer la última jornada de la pasarela Bridal, seguida de Amarca, Ogadenia Couture y Montenapoleone Uomo

Tercer día de desfiles de Bridal Collection Moda Cálida 2023

La tercera y última jornada de desfiles de Bridal Collection Gran Canaria Moda Cálida comenzó ayer, poco después de las seis de la tarde, con los últimos rayos de sol de la jornada vespertina entrando por las puertas acristaladas del salón diseñado por Miguel Martín Fernández de la Torre en el Hotel Santa Catalina.

En las sillas, sillones y sofás de estilo romántico, los asistentes, que no llenaron el aforo, esperaban el arranque del desfile de la firma palmera Pomeline, que dirige Ana María Rodríguez, que lo hizo al ritmo de Penny Lane de The Beatles.

La firma propone, con su colección Peonia, 12 creaciones con una variada paleta cromática que va desde el clásico e imprescindible blanco, pasando por el coral, el verde lima o el violeta.

Apuesta por trajes de dos piezas en tono celeste con corte asimétrico en la falda y fruncido lateral, vestidos blancos vaporosos y con volumen y hasta una combinación de pantalón con casaca violeta a juego. Top de rejilla dorada que atrapa la luz y la atención junto a faldas de encaje rosa que ensalzan la figura y pamelas que dan un toque de sofisticación.

En definitiva, creaciones de aire romántico para las novias y más clásicos y llenos de color para las invitadas. Todo decorado con los fufos, que ya son seña de identidad de la firma, realizados con pequeñas tiras de organza dispuestas a modo de pluma, que la firma hace reciclando restos de tela sobrante de otras colecciones, en una clara apuesta por la sostenibilidad.

Tras ella, le tocó el turno a la firma tinerfeña Amarca, que dirigen Sergio López e Itahisa García, con la colección Susurros de amor. Una apuesta total por el blanco y los rosas empolvados con diseños románticos conseguidos a través del uso de los tules de seda, las lanas frías y los creps. También hubo hueco para las creaciones en tono ciruela con motivos florales.

La firma consiguió crear una atmósfera etérea y angelical que dejó absorto y sin aliento al público. Desde vestidos vaporosos de escote en uve y espalda descubierta o semidescubierta, pasando por mangas bombachas o de tul que consiguen dar un volumen único y que ensalzan la figura femenina, sin olvidar su apuesta por el pantalón con cola incorporada.

El uso de perlas, plumas y pequeños apliques de piedras añaden fantasía y elegancia atrapando la luz de las lámparas de araña que iluminaban el salón. Una exquisitez de colección, que hará las delicias de cualquier novia y también de sus damas de honor.

La diseñadora Arantxa Arenas presentó su colección Siempreviva pasadas las ocho de la tarde. Sus diseños hicieron un homenaje a las mujeres pioneras en campos como la investigación, la política, la ciencia o la educación.

Todo un alegato por la igualdad que da voz a las mujeres silenciadas por la historia que pusieron las primeras piedras para las futuras generaciones, a través de diseños que beben de su poderío. Arenas imagina con sus propuestas cómo serían esas pioneras hoy en día.

Creaciones donde predomina el uso del raso y que abarca desde el tradicional blanco pasando por el gris, el rosa o el dorado. El negro también está presente en faldas de amplio volumen que se mueven al son de las caderas o creaciones superpuestas y de corte asimétrico.

También incluye pantalones de corte campana o faldas por encima de la rodilla en diseños de dos piezas. Blusas a rayas en cuatro tonos o tops de lunares completan una colección que cuenta con un diseño que evoca al mítico traje de Marilyn Monroe en La tentación vive arriba.

Broche

A las nueve de la noche arrancaba el último desfile de esta décima edición de la pasarela con la colección Clásicos que enamoran de Ogadenia Couture, inspirada en patrones de moda que hicieron historia desde la década de los 20 a los 50.

Guiños a la época dorada del cine así como a la moda americana y parisina, versionados y actualizados para adaptarlos a la actualidad.

Una colección que sorprende al combinar diseños sensuales con creaciones más sobrias y elegantes, con una parte de la colección retomada de patrones de sastrería de caballero y adaptados a las curvas de la mujer, en combinación con diseños puramente femeninos y delicados.

Además, el 80% de las prendas de la colección son susceptibles de mezclarse entre sí, para crear estilismos personalizados, por lo que la versatilidad es otro valor de la colección.

Sus diseños desfilaron junto a las propuestas la de colección Montenapoleone Uomo de Lucas Balboa, que mantiene la línea de estilo británico tan característico de él. Tejidos suaves pero otoñales adaptados al clima canario, lanas frescas, lanas texturizadas y linos mezclados con suaves alpacas que rezuman buen gusto y elegancia. Apuesta por los grises brumosos, príncipes galeses, cuadros escoceses burdeos y grises y una amplia paleta de marrones, beiges biscuit y azules. Líneas que envuelven al hombre en trajes y abrigos, chaquetas y gabardinas.

Un desfile a dos que puso la guinda a las tres jornadas de esta décima edición de la pasarela del Bridal Collection Gran Canaria Moda Cálida y que demuestra, un año más, la calidad y excelencia de los diseñadores canarios.