Música

La ópera 'Lucia di Lammermoor' dedica sus tres pases a Guillermo García-Alcalde

El drama trágico con música de Gaetano Donizetti se representa en el Teatro Pérez Galdós los días 23, 25 y 27 de mayo a las 20.00 horas.

La soprano Jessica Pratt y el tenor Xabier Anduaga durante la presentación de la ópera "Lucia di Lammermoor'.

La soprano Jessica Pratt y el tenor Xabier Anduaga durante la presentación de la ópera "Lucia di Lammermoor'. / Elvira Urquijo A.

Martina Andrés

Martina Andrés

La figura de Guillermo García-Alcalde ha estado muy presente hoy —como no podía ser de otra forma— en el acto de presentación de la ópera Lucia di Lammermoor, cuarto y penúltimo título de la 56º Temporada de Ópera de Las Palmas de Gran Canaria. Los tres pases de esta representación que tendrán lugar los días 23, 25 y 27 de mayo en el Teatro Pérez Galdós, estarán dedicados al ilustre periodista y crítico musical que fallecía el pasado lunes.

«Quisiera tener un emotivo recordatorio a la figura de Guillermo García-Alcalde, gran periodista, compositor y un gran entendido de la ópera y de la música en general, socio de Amigos Canarios de la Ópera», ha declarado el presidente de esta institución, Óscar Muñoz al comienzo del encuentro. Junto a él, el director general de la Fundación Auditorio Teatro, Tilman Kuttenkeuler, también se ha referido al periodista: «Me emociona que dediquemos esta pieza a Guillermo García- Alcalde, que ha acompañado a este teatro desde hace décadas y también al Auditorio».

Los Amigos Canarios de la Ópera estrenaron este título por primera vez en 1969. Desde entonces, Lucia di Lammermoor, que se estrenó por primera vez en el Teatro San Carlo de Nápoles en 1835, se ha representado un total de nueve veces en Las Palmas de Gran Canaria. En palabras de Ulises Jaén, director general y artístico, esta ópera es «la obra cumbre del bel canto italiano, no solo por su música, sino por su dramaturgia. Es la obra probablemente más representada de este periodo».

Jaén también ha querido destacar el «reparto excepcional» con el que cuenta la representación, elenco en el que están presentes la soprano Jessica Pratt, en el papel de Lucia di Lammermoor, el tenor Xabier Anduaga, que debuta en el pape de Edgardo di Ravenswood, o el barítono Youngjun Park, en el papel de Enrico Asthon.

Pratt, considerada una de las mejores intérpretes de bel canto, debutó en 2007 en este rol y lleva, en palabras de Jaén, «15 años siendo la mejor Lucia sobre los escenarios». Pratt, por su parte, ha declarado que este es «el mejor cast» que ha encontrado en toda su carrera para representar este título: «He cantado Lucia al menos dos veces al año, en el Metropolitan, en Australia, Perú, en La Scala..., y aquí, en Las Palmas, yo encuentro el mejor reparto de todos», ha indicado la soprano.

Por su parte, Anduaga ha recordado la primera vez que cantó junto a Pratt haciendo otro rol hace ya casi siete años y ha señalado el «lujo» que supone compartir escenario con una soprano de su talla. «No sé cómo explicaros lo que puede suponer para mí, después de todos estos años, cantar con ella y poder debutar un papel como Edgardo».

Un tema que atraviesa épocas

Lucia di Lammermoor es un drama trágico en tres actos con una historia que, aunque pueda parecer lejana en el tiempo, es «infelizmente muy actual», en palabras de Bruno Berger-Gorski, director de escena de la representación. «Hay muchas mujeres en el mundo que son forzadas por la familia a casarse con un hombre al que no quieren», explicaba el director escénico.

Con un libreto en italiano de Salvatore Commarano, esta representación está basada en la novela The Bride of Lammermoor de Sir Walter Scott. Lorenzo Passerini, a cargo de la dirección musical, ha indicado la dificultad que supone hablar de esta ópera tan conocida, «representada muchas veces en todo el mundo y muy querida por el público».

Un desafío al que se han enfrentado como una oportunidad porque, en palabras de Passerini, «Lucia di Lammermoor contiene todas las emociones del hombre: la pasión, la amistad, el amor, el odio, la falsedad, la verdad» y, además, «a nivel musical encontramos el virtuosismo, el bel canto, el dramatismo, algo de Verdi, algo de Rossini… Es una ópera que trae el pasado al presente. Como ha dicho Bruno, es una ópera actual», concluía el director musical.