El campeón quiere más

Gran Canaria puede presumir de contar con el mejor equipo de Europa en la disciplina de hockey línea. El Molina Sport ha conseguido en los últimos cinco años convertirse en el dominador de la copetición española y, desde el curso pasado, también la del Viejo Continente. Su palmarés así lo acredita: dos Ligas Élite, tres Copas del Rey, una Supercopa de España, una Sparta Cup y una Copa de Europa. Ocho títulos que pueden convertirse mañana en nueve, si los hombres dirigidos por Kevin Mooney logran conquistar en Barcelona la que sería su segunda Supercopa.

Los grancanarios viajan a Barcelona con menos de una semana de preparación para competir por el primer trofeo oficial del curso nacional. Para ello, deben superar en semifinales esta tarde (18.00 horas) al anfitrión del torneo, el Rubí Cent Patins. La segunda semi enfrentará al CPLV Caja Rural de Valladolid con el Hockey Club Castellón, partido que se disputa a las 19.30 horas de hoy. Los vencedores de ambos duelos se ven las caras al día siguiente (10.45 horas) en la pelea por el entorchado.

El molina Sport defiende la corona conquistada el curso pasado en casa, el Pabellón García San Román, la primera vez de su historia; derrotaba al Valladolid al materializar Chuck Baldwin el gol de oro en la prórroga. Ese tanto daba el triunfo a los amarillos por 4-3.

Renovarse o morir

El club presidido y fundado por Alejandro Molina ha apostado una temporada más por conservar el bloque que el curso pasado le convirtió en campeón de la Supercopa, de la Liga Élite y de Europa. El norteamericano Kevin Mooney vuelve a ejercer las funciones de entrenador-jugador, con la ayuda de su compañero Andreu Tomàs.

Únicamente dos caras nuevas son las que presenta el platel de la escuadra grancanaria para esta nueva temporada. Por una parte está la incorporación del jovencísimo Jordi Soler, una clara apuesta por el talento incipiente que jugará por primera vez lejos de su Castellón natal; por otra, el fichaje del experimentado Mario Díez, del Tenerife Guanches, jugador con fama de duro en la máxima categoría; éste recala en el club grancanario para reforzar el ataque –fue el máximo goleador nacional– y también la parcela defensiva.

Jordi Soler, del Castellón y Mario Díez, del Tenerife Guanches, únicos fichajes del curso

En este aspecto, en la anterior campaña, el Molina Sport no estuvo tan excelso como en la ofensiva. Si con 158 goles fue con mucho el equipo más goleador de la Liga Élite, acabó como el tercer conjunto con menos tantos encajados.

Además de Mooney, que es todo un seguro de vida en el ataque –con 83 dianas fue el máximo goleador de la máxima categoría–, el cuadro amarillo se ha asegurado la continuidad de Chuck Baldwin, un jugador dotado de un instinto asesino en los momentos calientes y que ha decidido numerosos partidos y torneos.

La continuidad de jugadores de talla mundial como Jan Andrysek, Andreu Tomàs, los hermanos Cabalin, el capitán Pawel Zasadny o Dani Gutiérrez, entre otros, le da un fondo de armario inigualable en los rivales. Además, Javi Tordera y David González son un seguro de vida para la portería de un Molina sediento de títulos.

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