De Quique Wolff a Vicente Del Bosque. El exjugador de la UD y Real Madrid comparte la afirmación del seleccionador nacional Vicente Del Bosque, que reconoció en una entrevista a LA PROVINCIA / DLP que el conjunto grancanario, de aquella década mágica de los setenta completó méritos para ´conquistar algún título´. Para el argentino, "por supuesto que aquel equipo pudo ganar y lo tuvo cerca. Vicente tiene razón pero hay circunstancias que valen más que un título. Si te recuerdan con este cariño y no ganamos una Copa o una Liga, es por algo. El título es muy importante y entiendo a Vicente; la UD merecía un título. No me olvido el partido ante el Barcelona [la final de Copa del Rey en el Bernabéu en 1978]. Al día siguiente nació mi hijo y puedes ser grande sin ganar. Recibimos este cariño y así nos sentimos de una manera increíble", detalla el que fuese amarillo desde 1974 a 1977.
Además, insiste en el peso de los recuerdos. Una fragancia mágica que permite a este grupo de jugadores sentirse eternamente en el paraíso. "¿Cómo no vas a vivir de recuerdos? Por supuesto que te llenan y siempre lo valoras cuando termina tu carrera. A veces esas cosas no le das la importancia que merece", concretó ayer el exjugador de la UD en el Santa Catalina.
Wolff, premiado por RTVE con la medalla de oro del curso 1974/75 al Mejor Jugador de Primera, dejó la UD y dio el salto al Madrid, club con el que conquistó dos Ligas. Exponente de magia, cuenta con el agrado y el cariño de la marea amarilla.
El acto de ayer contó con una nutrida representación de la UD en el Santa Catalina como Germán Dévora, presidente de honor de la entidad, Nicolás Ortega, vicepresidente, Rafael Méndez, consejero, Patricio Viñayo, director general de Gestión, Toni Cruz, director general Deportivo y Carmelo Pérez, responsable de la Fundación del club.
