Pese a la gran temporada realizada por el equipo de Maldonado, el Herbalife Gran Canaria quería al Joventut como rival para los cuartos de final de la Copa del Rey. Era un secreto a voces admitido en todos los corrillos y, en consecuencia, los amarillos se mostraron satisfechos tras el sorteo. Sin embargo, la prudencia se impone a la hora de medir las opciones, templar las ilusiones y respetar al oponente como el tercer mejor equipo de la primera vuelta en la Liga Endesa.
Bajo estas claves, desde el respeto y la prudencia, se expresó, tras conocer el nombre del rival, Tomás Bellas, capitán amarillo. "Cualquiera que nos hubiera tocado será difícil", advirtió éste antes de explicar: "esta claro que, apriori, parece que el mejor que nos podía tocar era el Joventut pero cada vez que pensemos esto tendremos menos opciones de ganar".
El base madrileño, en pleno viaje a Turquía donde los amarillos se enfrentan el miercoles al Banvit Bandirma, admitió ciertos condicionantes previos. "Tendremos que aceptar que vamos a tener nosotros la presión. Jugamos en casa y la gente tiene esperanzas puestas en que saquemos esto adelante. Pero no podemos olvidar que nos han ganado en el partido de liga, que hacen un baloncesto increíbles y que nadie les ha regalado el lugar que ocupan en la clasificación", valoró Bellas antes de acabar: "No estamos ni contentos ni disgustados sino como un duelo importante en el que todo puede pasar".
