El FC Barcelona visita por primera vez en la historia el estadio de Butarque, donde les espera un Leganés sin complejos y donde se ha anunciado en sus carteles con ironía una frase que ha propiciado carcajadas: 'Partido trampa, no podemos confiarnos'.

Loscierto es que este mediodía el estadio 'pepinero' presentará un lleno absoluto y el club prepara un gran recibimiento para ambos equipos. Cuando estos salten al campo se desplegarán dos mosaicos y se cantará el himno tradicional del Leganés a capela. Todo una fiesta a costa del FC Barcelona.

El Barcelona ha reservado a uno de sus puntales, Sergio Busquets, para enfrentarse al Leganés, un ambicioso equipo que ha dejado buenas sensaciones en el arranque del curso.

Tras el aviso sufrido hace una semana ante el Alavés, un equipo recién ascendido a Primera, el Leganés se cruza en el camino del Barcelon y si frente al Alavés, Luis Enrique tuvo que alinear a un once poco habitual que se reflejó en la falta de coordinación sobre el césped, tres días después todo cambió con la vuelta a la acción del tridente formado por Messi, Neymar y Luis Suárez.

El regreso del tridente (131 goles la pasada temporada, 122 en la anterior) es una garantía para los azulgranas. Además ante el Celtic, Luis Enrique recuperó a Andrés Iniesta, lesionado desde la Supercopa de España ante el Sevilla, y también a Ter Stegen, ausente frente al Alavés por un problema muscular.

Los de Asier Garitano cayeron la última jornada en su visita al Sporting de Gijón, pero con anterioridad fueron capaces de sumar cuatro puntos ante el Celta de Vigo y el Atlético de Madrid, sin encajar ningún tanto en ambos partidos.

Esa solidez defensiva es la que esperan repetir en el duelo de hoy ante su público, que prepara con ilusión la visita del Barcelona. El ambiente será inmejorable y se anticipa un cálido recibimiento a los dos contendientes en los instantes previos al pitido inicial.

El técnico del Leganés tendrá disponibles a todos sus futbolistas para esta cita. Eso le permite más alternativas y, por tanto, la posibilidad de introducir posibles novedades en el once titular, con una línea de cinco defensas.