¿Hace casi un año de su último combate. ¿No se le habrá olvidado boxear, no?
No, no, la verdad es que me siento muy bien. La preparación la hemos hecho tanto aquí en Gran Canaria como en Barcelona. Tenía muchas ganas de pelear y voy a tener la oportunidad de hacerlo por la disputa de un título de Europa, así que las ganas solo pueden crecer.
¿Qué es lo que más le ha costado de la preparación de esta pelea por el título de Europa de peso gallo?
Como siempre, la dieta [se ríe]. Pero sin duda, eh. Es una parte fundamental porque entrenar, aunque sufra, me gusta. Eso de dejar de comer... Es que soy muy goloso, pero hemos hecho la dieta a raja tabla. Me siento perfecto para el combate.
¿Cómo ha sido el plan de trabajo de esta pelea?
Llevamos ya 10 semanas, unos dos meses y medio entre la adaptación y demás. Hemos estado a tope, con mucho trabajo de resistencia larga porque el combate será de 12 asaltos. Eso y la estrategia de pelear contra un zurdo.
¿Es esa la mayor preocupación que tiene sobre Georges Ory, su rival el sábado?
Creo que sí, porque por lo que hemos visto su mayor habilidad es ser zurdo. Pero hemos hecho un buen trabajo y estoy convencido de que haremos una buena pelea.
Su última pelea también fue lejos de aquí y también por un cinturón, el EBU de la Unión Europea del peso mosca. Además tuvo polémica en la decisión final. ¿Lo tiene ya olvidado?
No, en absoluto... Fue mi primera derrota como profesional y de las caídas también se aprenden. Esa pelea me enseñó mucho. Quizá ha sido la mejor pelea en la que he boxeado porque estaba ante un rival muy fuerte, fuera de casa... La pelea fue muy igualada y la derrota me dio mucha fuerza mentalmente.
La derrota fue ajustada. Ahora vuelve a pelear fuera. ¿Qué hay que hacer para que te levante el brazo lejos de las Islas?
Es verdad que estuvo competida. Sé que para ganar fuera tenía que haber hecho un pelín más. He ganado en experiencia y es lo que aportaré. No es que haya que ganar por KO, pero el 70% de las veces, para que ten por ganador sí que hay que hacerlo. Para ganar fuera hay que dejárselo muy claro a los jueces y eso es lo que quiero hacer.
Georges Ory hace la defensa del título. Tiene un balance de 10-2-1. ¿Qué combate se imagina sobre la lona?
Uno muy complicado. A este nivel, cualquier rival es difícil y cualquier pelea es complicada. Por eso hemos una preparación muy concienciada. El combate se gana ahí, en el trabajo previo. Nos hemos sacrificado mucho tanto Yeray ['el Pera', su entrenador'] como yo. Han sido siete u ocho semanas a tope.
Habla de Yeray 'el Pera'. ¿Qué significa para usted su figura?
Es como un hermano mayor. La primera vez que me puse unos guantes fue con él y le estoy muy agradecido. Es un ejemplo, un luchador. He vivido de cerca todo lo que ha peleado [en referencia a la enfermedad de su hijo] y tengo una afinidad distinta con él, muy especial.
¿Qué objetivo tiene en mente después de este combate en Francia?
De primeras, descansar una semana por lo menos. Ya después intentar buscar otra pelea. Voy con la idea de ganar, de salir con la mano en alto, y poder defender el título en casa. Eso sería una cosa que me haría muchísima ilusión. Me encantaría tener la oportunidad de defender este campeonato en La Gallera del López Socas, sería un sitio único, aunque en un combate como este necesitas meter mucha gente para completar la bolsa. Sería un sueño, pero lo primero está en Francia el sábado y a eso es a lo que estamos.
