"No me esperaba que el vídeo tuviera tanta repercusión y eso, quieras o no, te sube los ánimos", afirma sorprendida Paula Medina. La semana pasada, la joven jugadora firguense, que la próxima temporada jugará en la Unión Deportiva Granadilla B, que milita en la Primera B femenina, se convirtió en un fenómeno viral tras ser captada dando toques a un balón mientras estaba en la playa de Las Canteras.

Fue a través de un vídeo grabado por un transeúnte que quedó impresionado por la calidad de Paula con el balón en los pies, motivo por el que decidió filmar el momento. Todo ese foco de atención la pilló desprevenida. Varios días después, el vídeo cuenta con más de 300 retweets y 1.000 me gusta.

El fenómeno fue tal que la futbolista, de 17 años, ya ha recibido peticiones para realizar más vídeos dando toques, pero con distintos balones. "Me piden que los haga con uno de rugby, aunque lo veo complicado, y estoy intentándolo con el de tenis", asegura sonriente, mientras apura sus vacaciones antes de coger el ferry a Tenerife para empezar el curso.

Como casi toda niña que tiene la ilusión de poder dedicarse al fútbol, Paula comenzó a dar balonazos con tan solo cinco años. Lo hizo en el CD Firgas, equipo representativo de su localidad natal. "Simplemente jugaba para disfrutar", indica la joven.

Posteriormente, en edad infantil se marchó al Guía, desde donde dio el salto al Unión Viera, equipo en el que lleva haciendo diabluras durante los tres últimos años. El cambio de corretear entre chicos a hacerlo solo con chicas fue complicado, ya que no podía jugar como lo había hecho durante sus inicios. "De estar acostumbrada a jugar con chicas de 14 años, pasé a competir contra otras de 30, que contaban con más experiencia", explica.

Sin embargo, el hecho de medirse con jugadoras más veteranas no la detuvo. Paula siguió su camino y ahora tendrá la oportunidad de demostrar quién es en la segunda categoría nacional. Con el balón en los pies y con metros por delante es como mejor puede sacar a relucir todo su juego, aunque normalmente actúe como interior.

Auge del fútbol femenino

"Me gusta más jugar de mediapunta. Yo siempre digo que lo mío no es meter goles, sino dar los pases", asegura la joven. Su destreza con el balón y sus actuaciones la llevaron a cumplir sus objetivos con tan solo 17 años. Jugó con la selección canaria y también con la española.

La llamada de esta última la pilló por sorpresa: "Estaba dormida en el sillón y de repente mi madre me despertó y me dio la noticia. Me quedé muy sorprendida por lo que significa. Es un honor haber podido vestir la camiseta de la selección española, aunque haya sido para la sub 16", relata.

Con el Viera vivió una situación atípica y complicada resuelta en los despachos por la Federación. La decisión del organismo dejó a las vieristas con la miel en los labios. En resumen, su victoria en una eliminatoria emocionante contra el Atlético Unión Güímar no sirvió para nada. "Fue un chasco porque habíamos subido a Primera B en una temporada espectacular".

A pesar de la decepción, la campaña pasada les sirvió para aprender y comprobar la buena salud que tiene el fútbol femenino en Canarias, ya que al término de la competición, tres equipos quedaron empatados a puntos: Femarguín, Unión Viera y Juan Grande.

Una buena salud que también se traslada a nivel nacional, ya que este año ha gozado de la visibilidad que muchos demandaban. Sobre todo estas chicas jóvenes que sueñan con jugar al balompié. "Se ha visto que en el fútbol femenino también hay calidad y gente que sabe jugar, que le gusta el fútbol. Hacemos lo mismo que los chicos y el hecho de que el Mundial se haya visto por la tele ha supuesto un paso muy grande", puntualiza la futbolista grancanaria.

Ofertas

Eso sí, todavía demanda más confianza, "que las marcas apuesten por las chicas, ya que son jugadoras de fútbol profesionales y tienen que estar al mismo nivel que los chicos". "No tenemos por qué ser tratadas de manera inferior en ese sentido", añade.

En breve, Paula partirá hacia la isla picuda, donde jugará para el Granadilla B. Considera que es una nueva experiencia que no podía rechazar, ya que "es una oferta bastante buena porque tengo la posibilidad de jugar en la liga nueva, la Primera B, y es un equipo que lo vale porque es un equipo que tiene mucho nombre, que tiene el 'A' en la máxima categoría. Esto te abre las puertas para poder debutar en la Liga Iberdrola", apunta ilusionada la joven jugadora.

Con el anhelo de poder proseguir con su sueño entrena a diario. Entre sus próximos objetivos están el de poder seguir en las convocatorias de la selección española y el de debutar en Primera con su nuevo club, el Granadilla. Calidad y ambición no le faltan, aunque sabe que tanto al fútbol femenino como a ella, les queda dar esos pequeños pasos para que esa fantasía pueda convertirse en una realidad.