Otros jugadores en polémicas por vídeos y escándalos sexuales

Cuatro canteranos del Real Madrid, tres jugadores del Real Madrid C y uno del Castilla, están siendo investigados por difundir un vídeo sexual con una menor de 16 años.

El caso de estos futbolistas de las categorías inferiores del Real Madrid no ha sido el único en provocar un incendio en el mundo del fútbol. 

A esta polémica le sigue recientemente la de Luis Rubiales, ahora ex presidente de la Real Federación Española de Fútbol con la futbolista Jennifer Hermoso tras la final del mundial Femenino, donde la Selección Española se proclamó como campeona del mundo. El ex futbolista del FC Barcelona Dani Alves también se vio hace unos meses señalado por haber violado a una joven en una discoteca de Barcelona, haciendo incluso que el jugador ingresara en prisión, donde se encuentra actualmente. 

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Sergi Enrich y Antonio Luna

Por otro lado, en el año 2021, los jugadores Sergi Enrich y Antonio Luna fueron condenados a dos años de cárcel por la difusión de un vídeo que se grabaron mientras mantenían relaciones sexuales con una chica.

Fue en la temporada 16-17 cuando el escándalo se hizo viral en los medios. Luna fue el autor de la grabación pero se aprecia a los tres en la misma y incluso se escucha a la mujer que deje de grabar.

Pero el escándalo sexual más reciente y de más gravedad fue sin duda el de Santi Mina. El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) confirmó el pasado mes de julio la sentencia de cuatro años de cárcel para el futbolista del Celta de Vigo Santi Mina por abuso sexual a una mujer hace seis años en Mojácar (Almería). Según informó Faro de Vigo, la acusación particular ha solicitado al Tribunal Superior de Justicia de Andalucía la "inmediata" entrada en prisión o, de forma subsidiaria, la retirada cautelar del pasaporte para el futbolista al considerar que hay riesgo de fuga.

Código Penal

El artículo 197 del Código Penal establece un rango de sanciones que varían según ciertos factores, como si se ha registrado un video de carácter sexual con o sin el consentimiento de la víctima, y en este caso, las primeras informaciones indican que se obtuvo el consentimiento de la víctima. 

Cuando ocurre este caso, el individuo que haya grabado y difundido el vídeo se enfrenta a una pena que oscila entre tres meses y un año de prisión, o una multa de seis a doce meses. Para aquellos que solo hayan difundido el vídeo, la pena varía de uno a tres meses de multa.

Sin embargo, en casos que involucran a menores de edad, las penas se agravan significativamente. El autor y el difusor del vídeo enfrentan sanciones que van desde siete meses y medio hasta un año de prisión, o una multa que oscila entre nueve y doce meses. Por otro lado, aquellos que únicamente compartieron el vídeo después están sujetos a una pena de dos a tres meses de multa. Estas medidas más severas tienen como objetivo proporcionar una mayor protección a los menores y disuadir la comisión de tales actos.