Los miles de despidos que desde 2010 han llevado a cabo las empresas de la Comunidad Autónoma les han acarreado un desembolso en concepto de indemnizaciones de prácticamente 400 millones de euros. Solo el año pasado fueron algo más de 60 millones los que tuvieron que abonar las entidades de las Islas, alrededor de 34,5 en conciliación y unos 26,5 tras sentencias favorables a los trabajadores, según las estadísticas del Ministerio de Empleo y Seguridad Social.
La extraordinaria destrucción de empleo que supuso la crisis económica ha tenido como consecuencia indirecta un también extraordinario incremento de la carga de trabajo en los juzgados de lo social. No en vano, los conflictos entre empresarios y asalariados se dispararon sobremanera, hasta el punto de sumar más de 40.000 en los últimos seis años (2010-2015). Miles de despidos que han costado en los juzgados a las empresas del Archipiélago un total de, exactamente, 385,6 millones de euros, tal como se desprende de las estadísticas del Ministerio que dirige en funciones Fátima Báñez.
El coste en 2015 llegó a cerca de 61,1 millones, una cuantía que está en línea con la de los ejercicios inmediatamente anteriores. Los 3.537 trabajadores canarios que optaron por cerrar un acuerdo en conciliación percibieron una indemnización media de 9.766 euros, mientras que fueron 10.094 euros en el caso de los 2.628 empleados que pleitearon hasta el final, es decir, que obligaron a la justicia a emitir sentencia.
El montante total, esos poco más de 60 millones de euros, es la segunda cifra más baja desde 2011, cuando fueron 58,9 millones, una disminución que también se observa en las cantidades medias que perciben los trabajadores. De hecho, esos menos de 10.100 euros que recibieron de media los empleados que tuvieron que pleitear en juicio también representan el importe más bajo desde 2010, ejercicio a partir del cual comenzó a suministrar estos datos el Ministerio de Empleo. Fue en 2013 cuando las empresas del Archipiélago tuvieron que afrontar el mayor desembolso, prácticamente 70 millones de euros (la indemnización media en sentencia superó entonces los 14.000 euros).
Aunque la cantidad desembolsada por las empresas disminuyó algo en 2015, lo cierto es que el número de asalariados despedidos se mantiene estable. Los expertos entienden que este menor coste se debe a que las empresas ya han prescindido de aquellos trabajadores que llevaban más tiempo en sus plantillas y que, por tanto, supusieron un mayor gasto en forma de indemnización. Sea como sea, los datos oficiales revelan que los trabajadores despedidos y con sentencia favorable en la Comunidad Autónoma fueron 6.165 el año pasado, cifra muy similar a la de 2014 (6.250) y 2013 (6.054) e incluso superior a la de 2012 (5.613) y 2011 (5.348).
