La guerra en Israel pone en jaque un negocio de cien millones para Canarias

La guerra en Israel y la inestabilidad en Oriente Próximo dejan en el aire la fructífera relación comercial entre Canarias y los países de la zona. El flujo de productos y mercancías entre las Islas y Estados como Kuwait, los Emiratos Árabes Unidos, Baréin o Arabia Saudí, amén del propio Israel, supone un negocio bilateral que mueve cada año una media de más de cien millones de euros. La inestabilidad generada en el corazón del Cercano Oriente por el intercambio de misiles entre Hamás y Tel Aviv afecta en especial a las importaciones. El Archipiélago les compra a los países de esta gran región sobre todo pescados y moluscos, aleaciones de aluminio y, por supuesto, las papas israelíes.

Durante la última década, según los datos suministrados este miércoles a este diario por ICEX España Exportación e Inversiones –la entidad pública estatal encargada de promover la internacionalización de las empresas y la inversión foránea en el país–, el tráfico de mercancías entre Oriente Próximo y la Comunidad Autónoma dejó una factura media anual de, exactamente, 95,4 millones. Sin embargo, se trata de una relación comercial en alza que en 2022 llegó a los 119,2 millones de euros, la segunda cifra más alta de la historia tras los 144,5 millones de 2018. De esos 119,2 del año pasado, la mayor parte, un total de 99,2 millones de euros, corresponde a las importaciones, es decir, a los productos y materias primas que las empresas isleñas se traen del Cercano Oriente, donde se mira con temor a Irán, cuya participación activa en la guerra acabaría por convertir la zona en un polvorín de consecuencias imprevisibles.

Joyas, polietileno, calamares, tabaco... La lista de productos llegados del Cercano Oriente es muy larga

Aunque a primera vista pueda sorprender, lo cierto es que Canarias importa una larga y variada lista de mercancías de Oriente Próximo. En 2022 destacaron por su importe –13,9 millones de euros– las compras de aleaciones de aluminio. No es habitual que se adquiera aluminio por una cuantía tan elevada en estos países, pero la carestía de los materiales de construcción ha obligado a las empresas del ramo a buscar nuevos proveedores y precios más baratos, y en el caso de las aleaciones de aluminio los han encontrado en Arabia Saudí. De esta región llegan también cantidades considerables de calamares, por los que los importadores isleños pagaron el último año 3,85 millones de euros. Y otros 3,6 se abonaron por pescados congelados. El volumen de compras también fue significativo en los casos de los artículos de joyería –prácticamente dos millones de euros–, el polietileno, uno de los materiales más utilizados en las industrias –1,9 millones–, las papas israelíes –1,7 millones–, el tabaco para fumar –cerca de 1,5 millones de euros– y los nitratos de potasio –1,1–.

Exportaciones

En cuanto a las exportaciones, la factura es más modesta, poco menos de 20 millones de euros en 2022, aunque ya hay hasta 137 firmas del Archipiélago que venden sus productos o mercancías en Oriente Próximo, la mayor cantidad de la historia. Las empresas canarias envían a los países de este gran territorio bienes como las aguas de tocador, por las que facturaron el año pasado alrededor de 1,6 millones; róbalos y lubinas, que dejaron en el tejido productivo de las Islas unos 1,5 millones de euros; merluza de la variedad argentina, por casi 1,3 millones; y, sobre todo, automóviles y piezas para la industria automotriz, por un total de 4,2 millones de euros.

La necesidad de proveedores más baratos ‘obliga’ a traer aluminio de la Península Arábiga

De esas 137 entidades del Archipiélago que en 2022 vendieron sus productos en el Cercano Oriente, un total de 24 son exportadoras regulares, esto es, empresas que tienen una relación comercial consolidada con clientes de estos países y en las que, por tanto, parte del negocio depende de manera directa del mantenimiento de unos lazos ahora amenazados por la guerra entre Hamás e Israel. Esos 24 exportadores regulares también son la cifra más alta de siempre.

En lo relativo a la inversión, los flujos de capitales son casi testimoniales, aunque desde los Emiratos Árabes Unidos llegaron a lo largo de la última década –desde 2014– cerca de 22 millones de euros. No obstante, el sector hotelero despierta cada vez mayor interés entre los inversores de estos países, si bien no es Canarias, de momento, su principal objetivo.

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