Un conflicto laboral entre los agentes y el Ayuntamiento dejó a Guía sin policías operativos en dos turnos de trabajo de tarde y noche esta semana, que obligaron al cierre de las dependencias por falta de efectivos disponibles. El alcalde, Pedro Rodríguez, decreta la supresión temporal del servicio nocturno y recurrió ayer a la delegación del Gobierno para cubrir con guardias civiles las carencias que se puedan producir en los reemplazos. Rodríguez alega que es víctima de "chantaje", y que "los ciudadanos no se lo merecen".
Pedro Rodríguez, que ayer celebró una convocatoria pública para dar su versión del problema, recordó que en noviembre de hace dos años una sentencia anuló un acuerdo del año 2006 que permitía a los policías bien cobrar 900 euros o solicitar 15 días de libranza por trabajar los festivos.
Por este motivo, la representación sindical inició una nueva negociación con el equipo de gobierno que, según el alcalde, permitió una serie de mejoras en sus retribuciones. Sin embargo, la negociación se ha bloqueado en un punto polémico sobre los servicios de noche y el descanso que les correspondería, "que supondrían entre 11 y 12 días más libres al año". Según el alcalde, el conflicto ha desembocado en que "desde mediados de diciembre se hayan negado a hacer horas extraordinarias, que respeto", y por las que el pasado año el Ayuntamiento destinó 81.703,46 euros. En cambio, el regidor relata que la situación se ha radicalizado ahora, y que hasta la cabalgata de Reyes estuvo a punto de cancelarse porque había previsto cuatro agentes, y solo acudió uno, porque el resto presentó una baja, al que se sumó el jefe. Y que ayer jueves había siete bajas y nueve el miércoles, en una plantilla "que cumple con el ratio", con 14 agentes activos, una oposición en marcha y la vuelta de otros policías. Esta situación obligó a echar el cerrojo al puesto en la noche del martes, porque no tuvieron tiempo de reemplazar las baja de última hora. Y lo mismo sucedió la tarde del miércoles.
Guía recurrió ayer a la delegada Mercedes Roldós, que se comprometió a colaborar con la Guardia Civil. "La seguridad está garantizada", añadió el regidor, que se mostró abierto al diálogo. Pero, añadió, nunca siendo "rehenes". A su vez, comunicó a los directores de colegios y al decanato del juzgado la situación. "Guía no les debe nada, porque se les paga religiosamente, pero los ciudadanos no se merecen esto". Además, cierra hasta que se solucione el problema las dependencias policiales de noche.
