Los Corralillos se moviliza contra «carreras de bandas que causan muerte»

Los vecinos, sin dormir y con miedo, por pruebas ilegales que «mueven mucha pasta»

Carreras ilegales en la carretera de Los Corralillos, en Agüimes

LP/DLP

Los vecinos de Los Corralillos de Agüimes sufren hace años carreras ilegales que se celebran en vías interurbanas que pasan por el barrio que van del Cruce de Arinaga al casco de Agüimes. Las denominan «rallys en toda regla», organizados por bandas en las que participan coches preparados para carreras de toda la isla que mueven «apuestas con mucha pasta. No podemos dormir por el ruido ni salir de noche por temor a un choque frontal. Sería de kamicazes». Avisan que estas carreras ya se han cobrado vidas entre los participantes y quieren evitar más. Hay una línea de investigación abierta y se han intensificado controles de Guardia Civil y Policía Local de Agüimes. 

El presidente del colectivo sociocultural Al Pie del Aguayro de Los Corralillos, Pedro Hernández García, recopiló las quejas de todos los afectados en un escrito que registró en el Ayuntamiento de Agüimes. Propone, entre otras, que se realicen controles con frecuencia en horas nocturnas y que se instalen radares de velocidad y puntos luz en la carretera GC-104, entre el Cruce de Arinaga y Los Corralillos. 

En esta vía, de unos cuatro kilómetros, perdió la vida hace dos semanas una joven tras una colisión frontal, que aunque no se vinculó a las carreras ilegales, sí se ligó a las condiciones de la carretera, una gran recta, muy estrecha, sin iluminación y que finaliza en dos curvas peligrosas. «Es territorio idóneo para este tipo de carreras ilegales», especifica Hernández, que recordó que esta actividad ilegal en el barrio ya se practicaba antes de la pandemia del Covid, eran residuales, algunos días, «pero tras la desescalada son prácticamente a diario».

Los controles se intensifican pero las sanciones no pasan de multa y de restar puntos en el carné

El escrito remitido a la Junta Local de Seguridad del Ayuntamiento ya advierte de que «para evitar desgracias personales, el colectivo vecinal reivindica que los organismos competentes, tanto la corporación local y especialmente el Cabildo de Gran Canaria como titular de las vías, adopten las medidas oportunas para erradicar esta actividad ilegal». 

Según las estimaciones, estos  vehículos superan con creces los 150 kilómetros por hora en vías con límite de 40 a 60 kilómetros. Hernández ratifica que esta práctica «es un rally en toda regla en el que participan coches preparados para alcanzar altas velocidades de muchos municipios de la isla, como Telde, FirgasMoya o de la capital», apunta.

Especificó que esta semana, en un control de la Policía Local se denunció a siete conductores de estas carreras por exceso de velocidad, que por el tipo de sanciones se traduciría en la retirada en multa y retirada de 42 puntos del carnet de conducir en conjunto», según el presidente del colectivo. 

Advierte que los vecinos «no van a parar» hasta que se resuelva y está seguro de que detrás de estas carreras ilegales subyace la cuestión económica «en las que se invierten miles de euros en las apuestas que se organizan a través de estas bandas organizadas».

Un ocupante hace una peineta a un vecino que los grabó el pasado martes.

Un ocupante hace una peineta a un vecino que los grabó el pasado martes. / LP/DLP

En la reclamación conjunta, los vecinos afirman que estas carreras del todo «ilegales» suponen «un serio peligro para el resto de personas usuarias de la vía, en su gran mayoría vecinos de Los Corralillos». Aún así, especifican que «ya se han saldado con numerosos accidentes, alguno con desenlace fatal», asevera el portavoz, en referencia a los accidentes que han sufrido los propios participantes de estas competiciones y que han fallecido.

Una joven falleció en esta misma vía hace días y no se vinculó a las carreras, pero sí a la nula iluminación

Hernández García puso como ejemplo que uno de sus vecinos «hace un día solamente, caminaba por el tramo de entrada al barrió y escuchó el ruido de uno de estos coches que se aproximaba. Con poco tiempo pudo grabarlo con el móvil. Y la respuesta del copiloto al verlo fue sacar el brazo y hacerle una peineta. Encima con cachondeo». 

Uno de los coches accidentados durante las carreras ilegales en la carretera de Los Corralillos (Agüimes).

Uno de los coches accidentados durante las carreras ilegales en la carretera de Los Corralillos (Agüimes). / LP/DLP

Otra vecina del barrio lloraba porque «no puede más». Madruga, tiene un bebé y no duerme hace meses por los ruidos de los coches de las carreras. Ahora está con medicación, «algo que no se concibe en un barrio tan tranquilo como este», reitera el portavoz. Según declara, las carreras son casi todos los días, desde las 10.30 hasta las 2.00 horas o más. E independientemente del peligro que conllevan, otra preocupación vecinal es el ruido que generan los vehículos, preparados para correr que afecta también al descanso nocturno de la ciudadanía del barrio». Fuentes oficiales de la Guardia Civil confirmaron que ya se han intensificado los controles viarios en el barrio

Operación ‘A todo gas’

El caso no es nuevo. Estas bandas organizadas van rotando por distintas vías una vez acorraladas, un negocio difícil de erradicar según han referido en distintas ocasiones fuentes de los equipos de investigación expertos en estas tramas delictivas. Este tipo de carreras de vehículos cuentan con muchos precedentes y de los más sonados, la operación de la Guardia Civil A todo Gas Gran Canaria. El desenlace de una investigación que se prolongó durante años,  ocurrió en Semana Santa de 2022, y se saldó con 42 detenidos. Además de Telde, este tipo de organizaciones se van moviendo por diferentes entornos no solo de la isla sino a nivel nacional.