La consejera de Sanidad del Gobierno de Canarias, Brígida Mendoza, confirmó ayer que "a lo largo del tiempo el servicio de Geriatría del Hospital Insular dejará de depender del Cabildo", institución que dispone de una reconocida especialidad en ese ámbito desde hace más de dos décadas. Sin embargo, esa prestación se ofrecerá desde el Hospital General Doctor José Molina Orosa, dependiente del Servicio Canario de Salud (SCS).

Mendoza indicó que "el Molina Orosa trabaja desde hace años en materia de Geriatría en la parte de agudos, crónicos y en el área sociosanitaria, por lo que en su día tendrá que integrarlo [en referencia al servicio del Insular] y la forma más adecuada de hacerlo es de forma progresiva". Añadió que "para ello se trabaja de forma coordinada, simultáneamente, junto con el personal del Molina Orosa, la dirección del servicio de programas asistenciales y el Cabildo Insular".

El pasado dos de junio, el equipo directivo del Hospital Insular solicitó que "no se implanten nuevos programas o servicios de asistencia geriátrica en el Área de Salud, sin coordinación con el Servicio de Geriatría del Hospital Insular, para evitar duplicidades, ineficiencia de los recursos y atención paralela, lo que significa un retroceso", según manifestaron el director del centro sanitario, Domingo de Guzmán, y el consejero de Sanidad de Lanzarote, Marci Acuña, ante la posibilidad de que el SCS contrate a un médico geriátrico para el Molina Orosa.

En otro orden de cosas, Mendoza se refirió a las listas de espera en Lanzarote y afirmó que "el Molina Orosa ha sido y es un modelo de eficiencia en cuanto a actividad quirúrgica se refiere, independientemente de que haya más o menos números". Es más, añadió la consejera, "Lanzarote aumentó su cirugía mayor ambulatoria en 2013 y eso es una muestra de eficiencia, a la vez que se ha mejorado la estancia media en las hospitalizaciones".