La residencia La Mareta, situada en la localidad turística de Costa Teguise y perteneciente a Patrimonio Nacional, volvió a abrir su puertas casi una década después para hospedar a un huésped ilustre. La vivienda fue el lugar en el que se alojó el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, durante su visita de apenas 24 horas a Lanzarote el viernes y sábado pasados para asistir en A Casa (Tías) a los actos de homenaje al escritor José Saramago con motivo del 20 aniversario de su consecución del Premio Nobel de Literatura y veinticinco años de su llegada a la isla de los volcanes.
El presidente Sánchez acompañó a su homólogo portugués, el primer ministro Antonio Costa, a la visita a la Fundación César Manrique, así como a la vivienda en la que residió José Saramago en el pueblo de Tías.
La última vez que La Mareta alojó a un mandatario fue en agosto de 2009. Era la tercera vez que su compañero de partido, el socialista José Luis Rodríguez Zapatero, presidente de España entre 2004 y 2011, elegía La Mareta para pasar sus vacaciones en el mes de agosto junto a su familia tras las estancias estivales anteriores de 2005 y 2006 cuando también era el inquilino de La Moncloa.
En La Mareta Sánchez recibió en la tarde del viernes a varios compañeros del PSOE en Canarias, entre ellos, al concejal de Policía Local y Festejos del Ayuntamiento de Arrecife y secretario general de la Ejecutiva Local del PSOE de Arrecife, David Duarte.
El político conejero destacaba el pasado sábado en su cuenta de la red social Facebook que "ha significado una jornada realmente histórica para el socialismo insular y para todos los compañeros que defendemos, a ultranza, unos ideales sin fisuras ni barreras; sobre todo para todos los ciudadanos que entendemos su figura, personal y política, como el paradigma de una gestión con principios sociales en mayúsculas".
Duarte agradecía también a Sánchez su atención, en concreto "los minutos" que dedicó a escucharle "a nivel personal y particular y a compartir impresiones generales conmigo, además de la confianza depositada en mi persona, en una jornada que los socialistas arrecifeños y lanzaroteños tardaremos en olvidar". El edil compartió a su vez una imagen en la que aparece junto a Sánchez en los jardines de La Mareta.
Hace unos meses Patrimonio Nacional llevó a cabo nuevas tareas de mantenimiento en La Mareta, ya que se barajó la posibilidad de que Sánchez se trasladara en agosto, dos meses después de acceder a la Presidencia del Gobierno, a ese palacete junto al mar para disfrutar de unos días de descanso, pero finalmente eligió Doñana, en Andalucía.
La casa que no habitó Hussein
A finales de los años ochenta el rey Hussein de Jordania regaló La Mareta, en la que nunca llegó a hospedarse, al entonces rey de España, Juan Carlos I, y este a su vez la cedió a Patrimonio Nacional, quedando así tanto a disposición de la Familia Real como de miembros del Gobierno y altos dignatarios de otros países.
El arquitecto Fernando Higueras, autor también del hotel Salinas, en Costa Teguise, fue el que proyectó en 1981 la restauración de una modesta vivienda existente a la que se le añadieron seis bungalows para acoger al servicio y al séquito del monarca hachemita. En el terreno había una antigua mareta para recoger el agua procedente de la lluvia y de ese antiguo ingenio hidráulico tomó el nombre la finca.
Desde la cesión a Patrimonio Nacional han sido varias las personalidades que han sido invitadas a tan ilustre inmueble.
La Familia Real Española comenzó a frecuentar La Mareta en abril de 1993 tras la muerte de Don Juan de Borbón, el conde de Barcelona. Siete años después, el 2 de enero de 2000, fallecía en La Mareta su viuda, María de las Mercedes.
El rey Juan Carlos y su familia, entre ella sus hermanas y sus sobrinos, se habían trasladado esas navidades a La Mareta para pasar el fin de año, que se convirtió en un amargo recuerdo de su estancia en la Isla.
Cinco años más tarde La Mareta recibía de nuevo a miembros de la Familia Real, entre el 26 de diciembre de 2005 y el 1 de enero de 2006. Esa vez a los entonces Príncipes de Asturias, Felipe y Letizia, y a su primera hija, la infanta Leonor, nacida dos meses antes. El matrimonio posó con la niña para los medios de comunicación en el portón de La Mareta.
En junio de 2008, la residencia acogió a las infantas Elena y Cristina, quienes viajeron entonces a Lanzarote para acudir al bautizo de Amelia, la cuarta hija de su prima Alexia de Grecia.
La primera personalidad en utilizar La Mareta fue el excanciller alemán Helmut Kohl (fallecido en 2017), en 1991, quien se alojó en ella durante la quinta cumbre hispano alemana celebrada en Lanzarote, bajo la presidencia del socialista Felipe González.
Otro dirigente político que estuvo en tres ocasiones en La Mareta, al igual que Rodríguez Zapatero, fue el expresidente de la antigua Checoslovaquia Vaclav Havel, quien murió en 2011. Havel se decandó por Lanzarote para recuperarse de sus convalecencias derivadas de sus problemas respiratorios y su débil salud.
Havel permaneció en tierra conejera en diciembre de 1997, entre el 22 de diciembre de 1998 y 11 de enero de 1999 y entre finales de 2000 y principios de 2001, alejado de las bajas temperaturas del invierno centroeuropeo.
En agosto de 1992 el expresidente soviético Mijaíl Gorbachov y su esposa, Raísa, pasaron sus vacaciones veraniegas en La Mareta. El matrimonio demostró su excelente forma física en una larga caminata por Lanzarote. Años más tarde el expresidente español José María Aznar aprovechó una de sus visitas a Canarias para dar el salto a Lanzarote y quedarse un fin de semana en La Mareta.
El complejo recobró vida, aunque de forma breve, hace unos días con Sánchez, casi tres años después de que una iniciativa gubernamental decidiera utilizar La Mareta para la promoción turística de España.
En diciembre de 2015 el entonces ministro de Industria, Turismo y Energía, José Manuel Soria, y el presidente de Patrimonio Nacional, Alfredo Pérez de Armiñán, firmaron un convenio que permite el uso de La Mareta para promocionar los intereses turísticos y la marca España mediante el hospedaje de personalidades de España y del resto del mundo de diversos ámbitos. Sin embargo, el único huésped que ha recibido La Mareta desde 2009 tras la última vez que alojó a Rodríguez Zapatero ha sido Sánchez.
