Los vecinos de La Isleta recibieron con alegría la aprobación del Plan Especial del Paisaje Protegido de La Isleta. Después de cerca de dos décadas de lucha por parte de los diferentes colectivos por fin la regulación de este espacio, que acoge uno de los conjuntos volcánicos más destacados de la isla, es una realidad.

"Es una batalla en la que ha habido momentos duros, decepcionantes y agobiantes", repasa Saturnino Martínez, presidente de la Asociación de Vecinos Nueva Isleta. Martínez no olvida lo sucedido en el año 1999 cuando la cantera Roque Ceniciento fue desclasificada para permitir al puerto de La Luz y de Las Palmas la extracción de áridos. "Para nosotros fue como un jarro de agua fría después de todo lo que habíamos luchado para que se declara espacio natural protegido, algo que conseguimos en el año 1994", explica. Los vecinos, al igual que los ecologistas, celebran la aprobación del plan especial, pero consideran que la playa de El Confital también debería ser incluida para impedir allí futuras construcciones. En cualquier caso, el Plan General de Ordenación de la ciudad impide en la actualidad cualquier construcción en la zona, que ya es de propiedad municipal, tras la compra de los terrenos durante el mandato de Pepa Luzardo (PP). Hoy en día aún queda una parcela de 50.000 metros cuadrados, enfrente de la playa, en manos privadas, ya que el Ayuntamiento está pendiente de permutarla por otros terrenos, como se acordó cuando se hizo la compra. En enero de 2009 los dueños le dieron un ultimátum al Ayuntamiento y pidieron por este terreno 40 millones de euros.