El único escenario de gobierno que contempla el alcalde de la capital grancanaria en funciones, el socialista Augusto Hidalgo, es la reedición del pacto tripartito con sus actuales socios Javier Doreste, de Podemos, y Pedro Quevedo, de Nueva Canarias. "Sigo teniendo total confianza en mis compañeros y en su palabra y creo que debemos ser el espejo en el que se miren otras instituciones del país y de Canarias también".
Así de rotundo se mostró Hidalgo ayer ante la posibilidad de que Nueva Canarias haya sondeado un acuerdo altenativo con el Partido Popular, un escenario que ayer volvió a desmentir de manera tajante el concejal en funciones de Nueva Canarias, José Eduardo Ramírez.
Hidalgo garantizó la reedición del pacto y dio por hecho que hoy se llevará a cabo la firma, aunque la incertidumbre sobre el resultado de la votación de los inscritos de Podemos en relación con el acuerdo se mantendrá hasta las diez de la mañana, debido al retraso que sufrió el inicio del proceso el pasado miércoles.
Reiteró su "plena confianza" en Doreste y Quevedo y en "el trabajo de estos cuatro años para mejorar las condiciones de vida de la ciudadanía. Aquí estamos para eso y ese objetivo es el que nos ha movido en nuestra actividad política. Hemos tenido una relación excelente durante los últimos cuatro años" y continúa igual, resaltó. El regidor señaló que se enteró por la prensa digital del sondeo efectuado por Nueva Canaria a la cabeza de lista del Partido Popular al Ayuntamiento, Pepa Luzardo, sobre la posibilidad de formar un gobierno que ella presidiría. Al respecto añadió que los tres socios hablaron el pasado miércoles por teléfono sobre el asunto. "Quevedo", explicó, "lo desmintió por completo".
La firma
"Estamos juntos porque queremos sacar adelante un proyecto político de transformación de la ciudad, un proyecto de izquierdas y de progreso y eso es lo que nos ha llevado a acordar esta propuesta de progreso que espero que mañana (por hoy) se firme", indicó el regidor que resaltó que el tripartito de la capital ha servido de modelo para la formación de otros gobiernos de izquierda en consistorios de Castilla La Mancha y Valencia, que "nos copiaron".
En este contexto, el socialista expresó su esperanza de que se siga el ejemplo de la capital en el Gobierno canario, el Cabildo de Gran Canaria y otras instituciones canarias. "Los pactos que se están viendo y que algunos dicen que son un poco antinatura pueden tener inestabilidad en el futuro. Yo siempre he defendido pactos de progreso, pero son los compañeros del PSOE los que tienen que negociar. Yo estoy centrado en Las Palmas de Gran Canaria, donde el pacto de progreso ha funcionado bien y ha recibido el refrendo de la gente" en las últimas elecciones con "más apoyos".
En palabras de Hidalgo, "nunca ha estado ningún otro pacto o acuerdo en la mesa de negociación", sólo la reedición del tripartito. "Jamás, por parte de los compañeros se nos ha colocado una pistola en la mesa. Ustedes han podido ver la negociación que ha durado tres o cuatro días", manifestó en relación a la libertad de la que han gozado los negociadores en el proceso para reeditar el pacto en la capital. Tampoco quiso Hidalgo contemplar un escenario en el que los inscritos de Podemos rechacen el pacto. Al respecto, pidió a la gente del partido de Doreste que "voten en conciencia, pero que valoren el acuerdo y el trabajo que ha hecho su compañero, que ha sido magnífico. Espero que sepan valorar ese trabajo", sostuvo.
Por su parte, el nacionalista José Eduardo Ramírez aseveró que "nadie de Nueva Canarias se ha reunido con Pepa Luzardo para hablar del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria", aunque aseguró que se están produciendo conversaciones a otros niveles, pero que nada tienen que ver con el Ayuntamiento capitalino. Dio por "cerrado" el acuerdo tripartito y expresó su esperanza en que Podemos, el PSOE y Nueva Canarias lo ratifiquen pronto para seguir adelante con el pacto de progreso.
"El pacto de Las Palmas de Gran Canaria es lo que la gente ha respaldado. Éramos 15 concejales y ahora somos 17. Hemos crecido y vamos a seguir adelante con este pacto. No se discute, no se plantea, no está en la mesa negociar ni trapichear con el pacto de la ciudad", indicó Ramírez, pese a que la posición del PSOE en la negociación de otros pactos como los de Santa Lucía y Telde "generan malestar evidente", pero no influyen en la ciudad de Las Palmas. A su juicio, esos pactos suponen "volver al pasado y llevar a las instituciones a aquellos que las llevaron al desastre, a la ruina y a la corrupción".
