Buena parte de los clientes habituales de los bares, restaurantes y terrazas de Vegueta y Triana han desaparecido con las vacaciones de Semana Santa, pero los empresarios del sector no desesperan y esperan compensar esa pérdida con los asistentes a las procesiones. Muchos locales esperan incluso aumentar el negocio en un 30%, sobre todo el Jueves Santo y el Viernes Santo, días en los que se espera la afluencia de miles de personas, que acuden a ver las procesiones y a visitar los monumentos. Otro reclamo importante para la clientela del próximo jueves es la oferta de tapa y bebida por dos euros y música en vivo, una iniciativa de la Asociación de Vegueta de Ocio y Restauración (AVO) que arrancó la pasada semana. El gerente de esta asociación, Yiyo Espino, señala que el Jueves Santo "suele se el mejor día de todos".

De momento, el Domingo de Ramos empezó muy bien, con una afluencia tremenda que cogió desprevenidos a muchos. Iván Vega, responsable de la terraza El Reloj, en Triana, asegura que la clientela se dobló. "Desde las doce del mediodía no paró de llegar gente hasta la noche. Primero llegaron los de la procesión de La Burrita y después la de Los Dolores", explica Vega, mientras muestra los restos de las ramas de olivos que se dejó olvidada la clientela. "No pensábamos", dice, "que fuera a venir tanta gente. El año pasado fue como un domingo cualquiera, pero este año fue buenísimo. Vinieron sobre todo familias".

Jorge Hidalgo, del restaurante La Buena Vida, en Mendizábal, espera que este año mejore, pero añade que "desde el pasado fin de semana ya se notó la bajada de clientes por las vacaciones en un 50%. No creo que compensemos esa pérdida con las procesiones". Modesto González, del restaurante De Dimas, en Mendizábal, sí que espera recuperar la marcha de sus clientes habituales con los asistentes a los desfiles religiosos. De hecho, ya tienen en mente menús especiales para el jueves, viernes y sábado. "Como no se come carne", comenta vamos a preparar diferentes modalidades de bacalao".

Delicias de pescado

En El Herreño esperan un incremento de clientes de un 30%, según cuenta su dueño, Evaristo Hernández, que ya prepara las delicias más típicas de estas fechas. Desde el sancocho, pasando por el bacalao encebollado y otras frituras del mar. También habrá sancocho en La Barbería, enfrente de El Herreño. "Lo ponemos todos los viernes y con más razón en Viernes Santo", informa Octavio Rodríguez, uno de sus dueños.

"Pasa mucha gente a ver las procesiones y muchos entran. La gente de las procesiones compensa el bajón de los clientes habituales. Es una clientela más familiar que a nosotros nos viene genial. Ojalá hubiera procesiones todos los días. Para nosotros es una buena semana".

También es buena para el restaurante del Hotel Madrid. "Para el Viernes Santo tenemos nuestros clientes fijos. Tenemos más de cien reservas. Ya tenemos todo el pescado vendido", bromean Vladimir y Paco Yanes, que añaden en serio que ése "es uno de los días más fuertes del año. El negocio se dobla".