Augusto Hidalgo, alcalde de Las Palmas de Gran Canaria, aseguró este martes que la bajada de la factura del agua en la capital anunciada en diciembre de 2020 se llevará a cabo después del verano. El Ayuntamiento eliminará, a través de los bonos COVID, el pago del mínimo del agua durante los próximos dos años, por lo que el usuario solo asumirá el pago del agua que consume, un plan que detalló durante el Foro organizado por la Cadena Ser acerca del futuro de la gestión del agua, donde estuvieron presentes Rogério Koehn, CEO de Saur -accionista mayoritario de Emalsa-, y el economista José Carlos Díez.
Hidalgo, que no descartó que la reducción de la factura se produjera este mes, garantizó que «ya después del verano nuestra idea es estar solucionando el problema de los cambios de tarifas del agua», para lo que están preparando «el entramado reglamentario de ordenanzas que va a generar la posibilidad de que podamos bonificar parte de la tarifa». «Tenemos que bonificar y hacer que la gente pague por lo que consume, y al mismo tiempo que aquellos que contaminan sean sancionados también. Es un elemento de justicia social», sentenció.
El Consistorio eliminará el pago mínimo del agua. Inma Medina, concejala de Aguas, detalló que «los primeros 7.000 metros cúbicos tienen un importe de 0,40 céntimos, que es una importante reducción». «Hay que beneficiar al más responsable y al que consume con moderación y se penaliza a quien consume más», coincidió con Hidalgo.
«Tenemos que bonificar y hacer que la gente pague por lo que consume, es justicia social»
La apuesta, que se suma al bono social, va a beneficiar al 85% de los abonados, a 150.000 familias y a cerca de 4.000 empresas, lo que va a suponer una inversión de unos 15,6 millones de euros. El bono social es una ayuda gestionada entre Emalsa y Servicios Sociales para cubrir la factura del agua de aquellas familias que peor lo están pasando. «A las familias que le comuniquen al Ayuntamiento o a Emalsa que tienen problemas para pagar no se les está cortando el agua», explicó Medina.
En el Foro el Ayuntamiento trató el Plan de Infraestructuras Hidráulicas 2020-2030 de la ciudad que promueve junto a Emalsa (Empresa Mixta de Aguas de Las Palmas). Bajo el título ‘El futuro del agua: empleo y sostenibilidad’, Hidalgo detalló la propuesta en la que llevan años trabajando el Consistorio y Emalsa y que ahora encuentra un perfecto acomodo con los fondos europeos de recuperación Next Generation, para los que aspira a 660 millones de euros.
«Se beneficia al más responsable y al que consume con moderación y se penaliza a quien consume más»
Koehn, CEO de Saur, destacó el trabajo que llevan realizando desde hace más de tres años en un proyecto conjunto con el Ayuntamiento para cubrir las necesidades de la capital en los próximos treinta años. «Y ahora surgen los fondos de recuperación y encaja muy bien el proyecto que se empezó a trabajar hace tres años. No podemos perder este tren y para eso la colaboración público-privada en la que venimos trabajando con el Ayuntamiento es muy positiva. Si ves a otros que piden los mismos recursos vemos que en Las Palmas se está haciendo diferente. Aquí se está haciendo de forma estructurada, sin improvisacion y tenemos más chance de obtener estos fondos», subrayó.
El economista José Carlos Díez celebró el proyecto del Ayuntamiento y de Emalsa ya que las «dramáticas» condiciones de vida que se dan en Las Palmas de Gran Canaria exigen la promoción de políticas transformadoras, como la hidráulica que ha proyectado su gobierno, en este contexto de cambio climático y crisis global porque «solo con turismo no se puede hacer un plan de desarrollo sostenible para Canarias».
«Los fondos encajan muy bien en el proyecto que empezó hace tres años. No podemos perder este tren»
«No solo se trata de crear empleo, sino de qué tipo de empleo se necesita y en eso se enfocan mucho los fondos del Next Generation. Canarias, que es un paraíso fiscal porque no hay un lugar con un Impuesto de Sociedades más favorable, debe transitar hacia un modelo turístico con menos visitantes que hagan un mayor gasto, de forma que esta actividad deje de impactar tanto en el medioambiente», indicó el profesor de economía de la Universidad de Alcalá.
«Solo con turismo no se puede hacer un plan de desarrollo sostenible para Canarias»
Proyecto
Los planes en los que el Ayuntamiento insistió ayer tienen como objetivo renovar unas infraestructuras «muy obsoletas», aseguró Hidalgo. «Hemos puesto un proyecto sobre la mesa que va a cambiar radicalmente todas las estructuras de la gestión del agua», añadió el alcalde, que se refirió a la nueva desaladora y una nueva depuradora que proyectan en la capital. «En caso de una avería no nos quedaremos ni un solo día sin agua», garantizó Inma Medina.
Los otros dos aspectos importantes que resaltó la concejala que mejora este Plan son resolver «de una vez por todas los 132 puntos negros que tenemos, acabar con esos problemas cuando hay lluvias y desbordamientos», además de «la creación de los tanques de tormenta para recoger todas esas aguas y que no se desperdicie para mantener los 9.000 metros cúbicos y distribuirlo por toda la ciudad». «Son recursos muy caros y todo está a punto para conseguir los recursos. Estamos en mejores condiciones que otros sitios», insistió Hidalgo.
Medina, por último, hizo énfasis en la calidad del agua de la capital y animó a consumirla. «Dicho por el Ministerio, el agua de Las Palmas es la mejor agua de España para el consumo. Ya había salido un estudio de la OCU y ahora lo confirma el Ministerio. Me he acostumbrado ya a cocinar con ella y consumirla. Tiene un sabor diferente pero es la de mejor calidad y se nota sobre todo en el bolsillo», sentenció.
